La Confederación Hidrográfica del Duero financiará la construcción de una depuradora ecológica de aguas residuales en Villanueva del Campo, que entrará en servicio en el año 2019, según informan desde el Ayuntamiento que preside Manuel Febrero López.
La instalación está presupuestada en 572.000 euros y no será una depuradora convencional, sino un humedal artificial en el que la vegetación y un sustrato de materia granular producirán una serie de procesos físicos o químicos que limpiarán las aguas negras, similares a los que se dan de forma espontánea en ciertas lagunas naturales. Así lo solicitó el Consistorio debido a que este tipo de estaciones tienen unos costes de funcionamiento y mantenimiento menores que los de una estación al uso. "Solo el gasto en electricidad sería demasiado para un pueblo de menos de 1.000 habitantes, y nuestra obligación como servidores públicos es evitar en la medida de lo posible cargar a los ciudadanos con impuestos y tasas demasiado elevadas, en el campo impuestos altos significan más despoblación", argumenta el regidor de Villanueva, Febrero López.
No obstante, el humedal artificial también requiere una serie de cuidados que el Ayuntamiento calcula que ascenderán a unos 10.000 euros -unos 12 euros por habitante-, por lo que será inevitable aprobar una "pequeña" tasa de saneamiento que todavía no está redactada, pero en la que previsiblemente se fijarán cantidades distintas para diferentes tipos de inmuebles, porque "no vierte lo mismo una vivienda que una explotación ganadera, por poner un ejemplo", argumenta el regidor, aunque matiza que tratará de que la tasa "sea una cantidad asumible para todos los propietarios".
La depuradora ecológica se situará cerca de la estación potabilizadora, en la zona de Valdehunco, y está previsto que su construcción comience a lo largo 2018.
Es uno de los grandes proyectos con los que abre el año este municipio terracampino junto a la ampliación de la residencia de mayores, que aunque está gestionada por una empresa privada es de titularidad municipal. Como ya ha adelantado este diario, el Ayuntamiento invertirá casi 300.000 euros en las obras que están a punto de ser licitadas con el objetivo de dotar a las instalaciones de 14 nuevas plazas para las que tendrán prioridad de acceso los solicitantes que lleven varios años empadronados en el municipio. El mobiliario, en cambio, lo sufragará la Fundación San Rufino con el remanente que tiene en sus cuentas, procedentes de la explotación del pósito de don Rufino.
