Poesía y narrativa para animar una tarde de otoño en Monfarracinos, que ayer vivía una velada literaria en la que se leyeron los relatos cortos que resultaron ganadores entre los 232 que concurrieron al concurso convocado por la Federación Espigas de asociaciones culturales de Tierra de Campos, Tierra del Pan y Norte Duero.

El literato que se alzó con el primer premio, el vallisoletano José Luis Bragado García, recogió su galardón de manos de la presidenta de la federación, Flor Guerrero, y puso voz a su obra titulada "La dura vida de un labrador de cuño", que transporta al receptor a un pequeño pueblo terracampino en 1950. Bragado García agradeció que por segunda vez los miembros del jurado de Espigas hayan considerado que una de sus creaciones es merecedora de un premio, pues hace dos años ya ganó el concurso de poesía de esta federación.

Ni el segundo ni el tercer premiado, Luciano López Gutiérrez y José Carlos Iglesias, pudieron asistir a la gala, pero el público sí pudo escuchar sus obras, "Las palabras perdidas de Alejo Moreno" y "La función". Entre los asistentes había vecinos de Monfarracinos, miembros de las asociaciones de otros pueblos, amantes de la literatura desplazados desde Zamora y autoridades como el diputado provincial por el Partido Judicial de Villalpando, José Ángel Ruiz.

El acto literario continuó con un recital organizado por gente de Monfarracinos, "La vida en verso", en el que tuvieron cabida los mejores poetas de las letras hispanas, pero que se centró principalmente en romances y canciones tradicionales de Castilla que lograron emocionar a muchos de los presentes en el público. Eran versos que casi todos habían oído en su niñez de labios de sus mayores, y como escribió el poeta austríaco Rainer Maria Rilke "la verdadera patria de un hombre es su infancia".

Monfarracinos demostró, una vez más, ser uno de los pueblos más dinámicos de las comarcas que abarca la Federación Espigas. Ahora, las asociaciones culturales se disponen a preparar el recital de villancicos que ya se ha convertido en un clásico de la Navidad en Zamora, y que el pasado año tuvo lugar en el teatro Ramos Carrión de la capital-