Aclarado el misterio. Las perforaciones en las cazoletas del yacimiento minero de Villardiegua de la Ribera fueron realizadas por investigadores del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en colaboración con el Instituto de Geología de la Universidad Complutense y del propio Consejo. Así lo ha confirmado el profesor Javier Sánchez Palencia, coordinador de los trabajos llevados a cabo en la zona minera de Villardiegua y Pino del Oro y director del grupo de investigación Estructura Social y Territorio-Arqueología del Paisaje.

Sánchez Palencia precisa que los sondeos, realizados en yacimientos de Villardiegua y Pino con una broca de diamante, tienen fines "científicos" para saber "hasta qué punto los romanos seleccionaban el tipo de granito para hacer las cazoletas". Las conclusiones de estas investigaciones están ya publicadas ante el total desconocimiento del Servicio Territorial de Cultural de la Junta de Castilla y León, que ni sabía que se habían hecho las perforaciones ni mucho menos las conclusiones de las nuevas investigaciones en la zona minera y el conjunto arqueológico en el Parque Natural Arribes del Duero.

La publicación de la noticia por parte de este medio tras las quejas recogidas por vecinos de Villardiegua que descubrieron los agujeros en un conjunto de cazoletas en la ribera del Puntón ha permitido saber que el CSIC ha continuado investigando en el asentamiento. Unos trabajos que el CSIC lleva años realizando y en concreto en el yacimiento arqueológico de Peña Redonda y su entorno se hizo en colaboración con el Ayuntamiento de Villardiegua y la financiación de diferentes programas de la Junta de Castilla y León.

La misma administración que desconocía las actuaciones, llevadas a cabo hace unos cuatro años. Tanto es así que, tras la publicación de la noticia, el Servicio Territorial de Cultura ha estado intentando esclarecer quién había realizado las perforaciones en las cazoletas de granito pues, a priori, se calificaba como un delito contra el patrimonio histórico. Incluso se preguntó al Servicio de Medio Ambiente, como responsable de los trabajos de señalización y cartelería en el Parque Natural Arribes del Duero. Fue horas después, cuando desde el Centro Superior de Investigaciones Científicas se aclaró la autoría de estas perforaciones descubiertas por vecinos de Villardiegua.