La XXIII edición de la Feria de la Cerámica da actividad a la Plaza del Mercado de El Puente de Sanabria, con la presencia de medio centenar de expositores y artesanos que estos días realizan sus demostraciones de trabajos y artes plásticas ante el público, vecinos de la comarca, pero también numerosos turistas que apuran los últimos días de vacaciones.

La feria da cabida al torno de cerámica, la aguja del curtidor, la gubia para la madera y el molde para el jabón artesano. Para estos profesionales el objetivo "es poder vivir de la artesanía, me gustaría dedicarme más a esto" apuntaba una de las ceramistas zamoranas mientras ultima los adornos de uno de los cuencos de cerámica.

Piezas que salen una a una de las manos, y no de una cadena de montaje y moldes repetitivos, dan entidad a la compra de cada uno de estos objetos. Los artesanos locales también participan de esta feria, y enlazan el Mercado Medieval con esta feria, que cierra el calendario para poder llevar los productos de sus talleres a la calle, a la vista de clientes.

La diversidad impera, desde bolsos y calzado de cuero trabajado a mano, a bisutería en plata, trenzado en fibras naturales o muebles trabajados a mano como los bargueños. El público queda prendado de los cacharros de barro de antaño, de Moreruela o Moveros, con toques modernos y nuevos usos para la vitrocerámica. Y de un sencillo cubierto, una de las profesionales es capaz de confeccionar una joya. Con las manos, como principal herramienta, se aprenden técnicas de macramé para elaborar hamacas y tumbonas, maceteros o pulseras.

En la apertura de la feria, público y autoridades pudieron participar en las exhibiciones de trabajos en alfarería y madera. No han faltado demostraciones de taller de cosmética y talleres participativos de alfarería, pintura en tela y madera. Hoy domingo finalizan los talleres demostrativos con un taller de cosmética, a las doce y media de la mañana, y por la tarde las otras especialidades de pintura, madera y macramé.