Una larga cola de coches casi parados es la escena que se puede contemplar este mediodía en la Autovía de las Rías Baixas A-52 entre Requejo y Padornelo, un tramo en obras donde los trabajos coinciden hoy con el incremento del tráfico dada la operación salida de la primera quincena de agosto.

Las obras provocan que todo el tráfico esté desviado por la calzada de Galicia, con un único carril en cada sentido y velocidad limitada a 80. La situación está siendo regulada por la Guardia Civil