Tras una "lucha" de 18 años, el Ayuntamiento de Fresno de la Ribera ha visto hecho realidad la depuradora de aguas residuales, que soluciona definitivamente el problema de depuración y los vertidos al río Duero. La infraestructura ha supuesto una inversión de 1,4 millones de euros y dará servicio a una población de 500 habitantes (con una previsión futura de 2.000). El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, junto al alcalde de Fresno de la Ribera, Emilio Fernández, visitaba ayer la nueva estación situada a la vera del Duero, auténtico monumento natural de este municipio ribereño que ha centrado buena parte de sus esfuerzos en su puesta en valor, con la recuperación de las márgenes y la vista puesta en el corredor verde Toro-Zamora "que indiscutiblemente tiene que pasar por Fresno" defiende el alcalde.

La depuradora es un paso importante, tanto por la mejora medioambiental como el servicio público para los vecinos de Fresno de la Ribera. Las obras han consistido en la realización de una depuradora de aguas residuales complementada con una amplia red de colectores, de más de 1.500 metros, para individualizar los vertidos industriales y conducir el resto a la EDAR municipal. También se ha ejecutado una pequeña planta de aireación prolongada con pretratamiento y un bombeo para unificar un segundo punto de vertido.

El consejero de Fomento y Medio Ambiente destacó en Fresno de la Ribera que el plan de depuración de las aguas en los municipios de más de 2.000 habitantes "es prácticamente una realidad, ya que está garantizada en más del 97 % de los municipios de Castilla y León". En lo que se refiere a la provincia de Zamora están funcionando siete depuradoras en Benavente, Fuentesaúco, Puebla de Sanabria, Tábara, Toro, Villalpando y Zamora, financiadas por la Junta con una inversión de 36 millones de euros.

Se encuentran pendientes de actuación seis municipios de más de 2.000 habitantes equivalentes, es decir, residuos no solo de las personas sino también de las industrias, de las cuales dos corresponden al Estado -en Fermoselle y San Cristóbal de Entreviñas- y cuatro a la Junta de Castilla y León -El Puente, Moraleja del Vino, Morales de Toro y Santa Cristina de la Polvorosa- y todas ellas "se encuentran en ejecución".

De la inversión global de 75 millones de euros en el conjunto de la Comunidad, los presupuestos para 2017 contemplan una partida cercana a los 17 millones de euros para saneamiento y depuración, de los que 8,5 millones corresponden a la provincia de Zamora.

Respecto a los municipios de menos de 2.000 habitantes, el consejero de Medio Ambiente anunció "un programa completo para que en un horizonte razonable de tiempo podamos actuar en todas las depuraciones de todos los núcleos de población". E hizo especial mención a los núcleos integrados en espacios naturales, que van a tener una depuración "de forma rápida".