Cerca de 30 personas se sumaron ayer a la ruta homenaje a los carrilanos organizado por el Club de Montañismo "Sanabria", con la colaboración de los Ayuntamientos de Lubián y Puebla de Sanabria, y el patrocinio de pequeños empresarios sanabreses. La marcha comenzó a la hora prevista, a las 10 de la mañana, desde el desvío del túnel de Padornelo por los caminos tradicionales hasta la Tuiza, siguiendo un trazado paralelo a la vía del tren, que definió la figura de los carrilanos.

Los trabajadores del ferrocarril, y especialmente del túnel 12, de Requejo, escribieron esta historia a mediados de los años 50, cuando el túnel se trabajó a pico, pala y dinamita.

Las herramientas elegidas ayer para homenajear a los veteranos trabajadores del túnel fueron los bastones, las gorras, los sombreros, gafas de sol y mochilas, y algún que otro tentempié.

Los accesos a Galicia tardaron más de 100 años en culminarse, desde el siglo XIX cuando Galicia reclamó y sufragó su conexión ferroviaria. Los trabajadores que ejecutaron las obras de esta vía que unía la Meseta con Galicia, tiene los días contados cuando entre en funcionamiento el nuevo trazado de Alta Velocidad.

Los contados carrilanos que todavía viven "son personas muy mayores". Algunos de esos matrimonios se quedaron a vivir en el viejo poblado una vez terminadas las obras de la vía, hasta que encontraron la posibilidad económica de regresar a su pueblo en Galicia. En pueblos como Lubián y Requejo fueron numerosas las familias de los carrilanos que buscaron el porvenir en los caminos de hierro, ayer era el camino de tierra marcado desde Padornelo, por Aciberos, Lubián sorteando las obras del AVE. La "estación" de llegada se colocó en la explanad de la Tuiza, donde los participantes pudieron reponer fuerzas con un almuerzo.