Un incendio forestal suele desatar en cadena la atracción masiva de los curiosos que en muchos casos aparcan en carreteras y caminos, una negligencia que puede originar graves consecuencias en caso de evacuación urgente, y que dificulta las tareas de extinción. Hay que tener en cuenta que la maquinaria pesada como los bulldozer son transportados en grandes trailers que necesitan un espacio amplio para pasar y poder maniobrar. Por este motivo la Junta prohibe aparcar vehículos en los caminos, pistas forestales y cortafuegos, hacerlo o interrumpir carreteras puede acarrear grandes multas. El lanzamiento de cohetes o artefactos que contengan fuego, en teoría, podrá ser solicitado en manifestaciones de carácter cultural, religioso y tradicional. La autorización del Ayuntamiento y Delegación del Gobierno deberá contar con informe favorable del jefe de Medio Ambiente, que podrá establecer medidas preventivas. Dado el alto riesgo las autorizaciones se aventuran casi imposibles, no obstante las solicitudes están bajo mínimos, el miedo es libre, pues el solicitante, si consigue el permiso, sabe que siempre será el responsable si se produce un incendio. Hace unos años un incendio originado en una boda originó alrededor de 300.000 euros de gastos solamente del operativo contra incendios.
