Telefónica asegura que 9.000 clientes de Iberbanda en Castilla y León han migrado ya satisfactoriamente al 3G o al 4G, y muchos otros lo harán en los próximos días hasta alcanzar el 96% de los 14.000 clientes que la empresa tenía en la Comunidad. Según destacan desde la empresa, el cambio permite a los antiguos clientes de Iberbanda "beneficiarse de una tecnología de mayor ancho de banda y capacidad gracias a la migración emprendida hace meses y que concluirá con el apagado de la red WiMAX, que se realizará una vez que todos los clientes que lo deseen tengan una alternativa de servicio con Movistar".

La razón principal para el cese del servicio de Iberbanda, explican desde Telefónica, es "la necesidad de sustituir una tecnología obsoleta, el WiMAX, que no es posible mantener operativa a corto plazo, por tecnologías de mayores prestaciones y ancho de banda, dando así respuesta a las peticiones de los propios clientes". El WiMAX ofrece hasta 3 megas, mientras que el 3G ofrece hasta 20 megas y el 4G hasta 40, y no tienen límite de descarga.

Desde Telefónica aseguran que los propios proveedores han sacado los equipos de WiMAX de su línea de producción, es decir, no habría piezas para dar respuesta a posibles incidencias ni para el mantenimiento de los equipos. Otras de las razones para el desmantelamiento de la red "son de tipo técnico y están asociadas con incompatibilidades en el mantenimiento y la prestación de servicios con anchos de banda inferiores a los estándares de calidad de la red de Movistar, y a la necesidad de unificar la red, como ha sido necesario hacer en otro tipo de infraestructuras, como por ejemplo, la ferroviaria, para adaptar anchos de vía ante la llegada de los trenes de alta velocidad".

Por tanto, la "razón principal" del cese del servicio WiMAX es, afirman, "la necesidad de modernizar la tecnología, que surge de la propia demanda de la mayoría de clientes de Iberbanda para poder tener ofertas de 3G o 4G para beneficiarse de mayor calidad del servicio y, a su vez, de ofertas convergentes que suponen un ahorro en las comunicaciones avanzadas a escala", ya que ofrecen ofertas de fijo, móvil y televisión en un mismo contrato.

Iberbanda quiere destacar que "esta es una decisión que corresponde a un plan nacional de mejora de la tecnología y de las prestaciones que ofrecía Iberbanda y que, en términos generales, supone una ventaja sustancial para la práctica totalidad de sus clientes en España, lo cual no es incompatible con que haya casos en los que se requiere una solución especial y a la carta, soluciones que ofrecerá Iberbanda a todos sus clientes antes de proceder al apagado de la red, según el compromiso adquirido con la Junta de Castilla y León. Además, la compañía quiere poner de manifiesto el gran número de clientes migrados ya en España con altos niveles de satisfacción, más de 9.000 en el caso de Castilla y León.

Iberbanda insiste en que se propondrá una alternativa de servicio para la totalidad de clientes que así lo solicite, es decir, nadie se va a quedar sin Internet si así lo desea, especialmente si se trata de servicios básicos (centros de salud, administrativos, etc.) a los que se está dando prioridad en la atención y la migración en coordinación con el Gobierno regional. Las alternativas son, fundamentalmente, 3G y 4G (Movistar Radio o Movistar Fusión Radio) "a un precio similar al actual", y recuerdan que "desde el pasado 22 de mayo se están dando ofertas especiales a los clientes de Castilla y León, que harán que el diferencial sea mínimo en comparación con lo que se estaba pagando, estas ofertas también serán escalables, es decir, dependerán del cliente concreto, la oferta que solicite y lo que estaba pagando anteriormente".

Sin embargo, algunos clientes de Iberbanda han manifestado a este diario su descontento porque las ofertas de Movistar duran un año y, en algunos casos, dentro de 12 meses empezarán a recibir facturas superiores a las que pagan ahora.

Finalmente, la empresa quiere destacar que para los escasos clientes que no disponen de cobertera 3G o 4G en la actualidad, "menos del 3% del total", Telefónica está tomando "medidas de urgencia y personalizadas". En primer lugar, un instalador está visitando cada vivienda para realizar mediciones y subsanar técnicamente el problema con la reinstalación de equipos. En segundo lugar, "en aquellos casos donde técnicamente no pueda haber solución móvil se ofertará la mejor tecnología disponible en cada caso concreto sin que se proceda en ningún caso al apagado hasta entonces".