Medio millar de personas ha participado en la propuesta de turismo etnográfico, "Recorriendo labores y oficios tradicionales de la Sierra de la Culebra", promovido por el Ayuntamiento de Puebla, para incentivar las visitas desde el otoño. El último grupo con 20 participantes recorrió la senda de Rita del Cuervo, y el arroyo truchas para visitar las Llagas del Lino y un molino tradicional. El curso del agua desviado por caños y canales define este espacio en Robledo, contiguo al Centro del Lobo Ibérico.
Un recorrido pensado no solo para el turismo sino para los propios sanabreses que desconocen algunos de los oficios que definieron la microeconomía de hace medio siglo. En el grupo que cerró ayer el periodo de visitas participaron niños, mayores y grupos familiares. La ruta se definió con calma y al ritmo de los más pequeños, que culminaron en la sede de la asociación cultural "El Reconco", donde los vecinos aguardaron en la sede social la fiesta de despedida de esta primera etapa.
Prolongar la estancia
La técnico de Turismo, Teresa del Estal, subrayó la buena acogida de esta propuesta que aprovecha la riqueza del entorno natural "es un éxito con el que se pretendía realizar visitas con grupos reducidos y más personales". Señalar que este programa de visitas se desarrollo en temporada baja, desde el mes de octubre hasta el comienzo de la época de mayor afluencia a la comarca. La iniciativa rescata construcciones tradicionales que "estaban cerradas y a las que se les ha dado una practicidad".
Un día más de visita, prolongar las estancias era otro de los objetivos "y se ha conseguido que algunas personas, después de visitar el Conjunto Histórico, dediquen un día más ante una oferta enriquecedora".
El componente enriquecedor es evidente cuando se pueden poner en práctica los oficios como la fabricación casera de pan en el horno situado dentro del lagar de cera de Robledo. La fabricación de velas, a partir de la cera de los panales, y la obtención de miel reflejan los usos tradicionales de los vecinos de los pueblos. El conjunto urbano de Robledo es llamativo por el uso de la piedra y la pizarra colocada en horizontal -en paredes y casas- y en vertical, en el paisaje agrícola de pequeñas huertas y fincas. Este año han censado una nueva habitante, el Mayo, que representa este año a una fémina.
En el mes de octubre se reanudará este recorrido por una de las zonas representativas de la Sierra de la Culebra, y con la posibilidad de realizar alguna demostración en el taller de forja de Robledo, como señala José Luis Rodríguez, uno de los guías de turismo. Este viaje por el paisaje y el paisanaje empieza cerca de Puebla, en la estación de tren construida en los años 50.
