Una presunta negligencia fue el origen del fuego que durante la noche del pasado miércoles al jueves arrasó gran parte del paraje de "La Cañada" de Valer de Aliste, montaña situada entre los ríos Frío y Espinoso, justo antes de unirse en el pago del "Pozo del Picaño". Una llamada a Emergencias 112 puso en aviso al operativo de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta que hacia la medianoche ya estaba actuando con un buldozer y varios efectivos humanos hasta darlo por controlado a pesar de las dificultades por los escabroso del terreno y los fuertes vientos.

Con la luz del día los agentes de Medio Ambiente descubrieron que el fuego se había originado en una lumbre mal apagada en plena ribera del río Frío, a la altura de "Las Horretinas". En el lugar una empresa ha estado realizando a lo largo de esta semana la corta y limpieza de los alisos del cauce del Frío sobre los que cruza la linea de transporte eléctrico de alta tensión de Losacio a Sarracín de Aliste, por seguridad, para evitar que lleguen a los cables. La lumbre utilizada para deshacerse de las ramas, al parecer, quedó con brasas y los fuentes vientos de esa noche las reavivaron hasta prender fuego a la pradera, seca a acusa de la sequía, extendiéndose luego al monte donde se quemaron más de 22 hectáreas de terrenos tanto públicos como privados de piornos, jaras y colmenas.

La Junta ha imputado a la empresa por el fuego y por no avisar antes. Aun teniendo permiso para quemas controladas siempre es obligatorio avisar el día anterior. Fuentes oficiales reconocen que silo hubiera hecho se le habría avisado que estaba prohibido esos días a causa de los fuertes vientos.