El temible impacto económico que la sequía puede tener este año en el mundo agrario ha llevado a la Caja Rural de Zamora a aprobar "líneas financieras de emergencia" que aminoren la previsible pérdida de rentabilidad que sufrirán los agricultores y ganaderos.

El plan, presentado ayer por el presidente de la entidad, Nicanor Santos, y el director general, Cipriano García, puede beneficiar a unos 5.000 agricultores y ganaderos zamoranos que son socios de la Caja, la cual ha realizado una previsión de entre 90 y 100 millones de euros apara aplicarlo, aunque la cantidad a destinará dependerá de las peticiones de los posibles beneficiarios.

Como explicó Cipriano García, las líneas financieras tienen dos vertientes. Por un lado se establece una carencia de dos años a todos los préstamos en vigor; es decir, la entidad prolongará durante 24 meses los plazos de los créditos que venzan este año.

Y por otro lado la Caja Rural pondrá a disposición de agricultores y ganaderos créditos en condiciones ventajosas, a cinco años siendo los dos primeros de carencia al cero por ciento y los tres restantes, de amortización con un interés del 1,25% sin comisión. La cantidad de dinero a solicitar estará en función de la declaración de la PAC, diferenciando el secano del regadío, y para los ganaderos de ovino, caprino o vacuno. Todo ello con el fin de "facilitar la recuperación en un año que se espera negativo" precisó el director general de la cooperativa de crédito.

Las cantidades establecidas por la Caja Rural son de 400 euros por hectárea declarada de secano y 800 por el regadío. Los ganaderos de ovino y caprino podrán disponer de un montante económico de 40 euros por cabeza y 100 euros por cabeza en el caso del vacuno. "Hemos establecido contacto con los notarios con el fin de que se facilite la parte proporcional de sus minutas, principalmente en la financiación alargada dos años se aplicarán tarifas reducidas para que los agricultores y ganaderos tengan los mínimos gastos posibles en estas operaciones" puntualizó el director general

Nicanor Santos consideró estas medidas aprobadas por la entidad que preside en la línea de "continuar apoyando a los sectores productivos de Zamora y en particular al agricultor y al ganadero", un sector tan afín a la entidad.

Unas líneas financieras de urgencia que responden a la preocupación que ya es patente en el sector agrario, como ha podido pulsar la propia entidad zamorana a través de sus oficinas en las comarcas rurales.

"Hay una inquietud importante, lo estamos constatando y la previsión del tiempo para los próximos días es negativa, por eso hemos activado estas líneas de emergencia para transmitir tranquilidad a nuestros socios" puntualizó Cipriano García. "La Caja está, entre otras cosas, para esto, para facilitar en la medida razonable de lo posible que resuelvan sus problemas de la mejor forma posible".