La Diputación de Zamora colabora activamente en el mantenimiento de la raza asnal zamorano-leonesa por considerarla "una de las razas más emblemáticas de la provincia, que representa un patrimonio de gran importancia no solo genética sino también social y cultural".

El esfuerzo de la Institución Provincial comenzó hace dos décadas cuando en 1997 la raza fue declarada "en peligro de extinción". Desde entonces la Diputación mantiene una línea de ayudas económicas a la cría en pureza que solo en 2016 supuso 43.000 euros, y otra ayuda para el funcionamiento de la Asociación nacional de criadores "Aszal" que fue de 8.500 euros el pasado año, si bien también financió un proyecto de investigación de dicho colectivo sobre el uso del asno como protección de rebaños frente a predadores.

Por otro lado colaboran con la Junta de Castilla y León y Aszal en el desarrollo del programa de mejora genética, y desde 1992 disponen de un núcleo de conservación de ejemplares de alto valor genético en Madridanos.

Por último, la Diputación contribuye a divulgar la raza organizando visitas de colegios, universidades y otros centros ganaderos dedicados al estudio de las razas autóctonas y cofinanciando la organización de la feria anual de San Vitero con una aportación de 10.000 euros. Ayer la propia presidenta de la institución, Mayte Martín Pozo, apoyaba con su presencia el desarrollo de la exposición.

"Criar, convivir y trabajar con las burras de pura sangre te llena de orgullo y tranquildad por que son fieles y dóciles, como tu ángel de la guarda día a día"