Pilar Vicente Crespo acaba de cumplir cien años en la residencia Virgen del Carmen de Peleas de Abajo donde se organizó una fiesta en su honor. Aunque natural de Salce de Sayago, vivió mucho tiempo en Moraleja de Sayago. Madre de tres hijos, durante su vida, además de ama de casa, se ha dedicado también a otros menesteres, como el cuidado de un rebaño de ovejas. La centenaria conserva una buena memoria, aunque físicamente tenga sus achaques.