La Unión Nacional de Asociaciones de Caza (UNAC) realizó "un análisis pormenorizado, profundo y con detenimiento" del proceso participativo sobre la caza promovido por SEO/BirdLife, y lo ha hecho a través del ingeniero de montes Antonio de José Prada, presidente de la Asociación Zamorana para la Defensa de la Caza y de la Pesca (Azadecap), elegido "por su experiencia, formación y cualificación".

El sector de la caza, una vez analizado el documento de la Sociedad Española de Ornitología, señala que "considera completamente desafortunado el proceso participativo por cuanto la caza de forma general se encuentra totalmente regulada, es un aprovechamiento legal de un recurso natural, lleva implícitas mejoras en la conservación de las especies cinegéticas y no cinegéticas así como de sus hábitats". Añade que la caza "es una herramienta de control poblacional, es una herramienta de gestión de especies perjudiciales a otros usos y usuarios sin que ello suponga sobrecostes a las Administraciones, y puede ser una herramienta de control y erradicación de determinadas especies (entre ellas las invasoras)"

También indican que la caza "es motor del desarrollo rural en amplias zonas del territorio, es una fuente generadora de riqueza directa e indirecta en el medio rural y, bajo una correcta ordenación, es compatible con el resto de usos y usuarios del territorio". En segundo lugar, según recoge el análisis realizado por Antonio de José, "los problemas asociados a la actividad cinegética o los aspectos técnicos de la caza deberían ser tratados de forma particular entre técnicos y personas cualificadas para ello, de una forma profesional entre los colectivos que últimamente se están postulando en contra de la caza y los colectivos que representan y defienden la actividad cinegética".

Pone de manifiesto que "es incompatible que aspectos tan complicados como la gestión y la ordenación del territorio y los recursos naturales sean compartidos a modo de referéndum, como absolutismo de lo políticamente correcto, del pensamiento único, que persigue que la masa social no piense por si misma sino, que se limite a aceptar lo que a través de las asociaciones contrarias a la caza, convertidas en correa de transmisión de divulgación, repiten sin cesar".

El sector de la caza expone que "habría que preguntarse el porqué de un proceso participativo, ya que por su propia definición se abre a la vista de un problema sobre el que se quiere tomar una decisión. Es evidente que SEO ve en la caza un problema". En su análisis la UNAC apunta que "la caza es un instrumento más de conservación de la naturaleza por lo que a la vista de la multitud de actividades humanas que sí afectan a la conservación de la naturaleza es poco menos que sorprendente que haya sido la actividad cinegética el motivo del proceso de participación". Exponen que "habría sido más interesante y beneficioso para la conservación de la naturaleza tratar otras actividades humanas que afectan de forma negativa al medio ambiente y donde apenas existen instrumentos de regulación o son insuficientes, como por ejemplo: atropellos asociados a infraestructuras, electrocuciones por tendidos eléctricos, colisión de aves con cableados aéreos, edificios de cristal o parques de aerogeneradores, aplicación de pesticidas y/o herbicidas con carácter general, prácticas agrícolas agresivas con la conservación de las especies, etc".