La falta de fondos con la que se ha encontrado el nuevo equipo de gobierno de El Cubo del Vino ha pasado ya factura a los trabajadores de la Administración Local, que no han podido todavía cobrar el sueldo de enero.

Así lo asegura el alcalde Juan Ramón García: "el día 8, la entidad bancaria se puso en contacto conmigo para informarme que no se podían pagar las nóminas de los trabajadores ya que no había fondos en la cuenta del Ayuntamiento. Tampoco se puede pagar a la Seguridad Social".

Ese mismo día el nuevo regidor mantuvo una reunión con los trabajadores para informarles de la situación del impago de sus nóminas, debido "a una falta de provisión de fondos del exalcalde Basilio Leal Gago expulsado de la Alcaldía, el 23 de enero al prosperar la moción de censura presentada en su contra".

Presunta ilegalidad

Se da la circunstancia de que cinco trabajadores fueron contratados, gracias a una subvención de 40.000 euros del Ecyl, cantidad abonada en la cuenta del Ayuntamiento, para atender, exclusivamente, los sueldos de los trabajadores. Parece que parte de ese dinero "ha tenido otro destino diferente. Y esto es una presunta ilegalidad cometida por el exalcalde" manifiesta el equipo de gobierno socialista en un comunicado público en el que se aborda otros asuntos.

Por ejemplo da cuenta de la interposición de una demanda judicial de la empresa eléctrica que gestiona el mantenimiento e infraestructuras del alumbrado público, contra el exalcalde por el impago de una factura de 25.000 euros que no ha sido atendida, "a pesar de las facilidades de pago que ofrecía la eléctrica" o del cese de la secretaria.

El exalcalde "la despide unos días antes de la celebración del pleno de la moción de censura, que ya sabía que iba a perder, con el objetivo de bloquear el Ayuntamiento y paralizarlo. De nada le va a servir el perjuicio ocasionado a los vecinos. La próxima semana, en un tiempo récord, tendremos ya un secretario/a gracias al esfuerzo y diligencia que ha puesto el actual equipo de gobierno".

El escrito concluye recordando "la dudosa conducta democrática" del diputado nacional José María Barrios asegurando que llamo a varios alcaldes del PP "para que asistieran al circo que prepararon, antes y durante la moción de censura" y se preguntan si "el objetivo era apoyar la voladura del ejercicio democrático, absolutamente legal como es la moción de censura? ¿Qué tiene que decir ahora de la gestión, manifiestamente mejorable de su pupilo? ¿Sería mucho pedirle que defendiera los intereses de Zamora y se preocupara por los graves problemas de la provincia?".