Jambrina rindió honores ayer a su patrón San Geminiano en una fiesta marcada por los ritos que se viven alrededor de esta celebración, principalmente durante la procesión, cuando los más pequeños volvieron a cumplir con la tradición que lleva aparejada la imagen de San Geminiano, protector de las hernias.

El que fuera obispo de Módena, en Italia, despierta en este pueblo gran devoción por los remedios de salud que se dice otorga y ante esa suerte de gracia se aglutinan a finales de enero los más chicos del pueblo, quienes entre risas y lagrimas, son aupados al paso por sus padres y padrinos esperando, entre lagrimas, conseguir del protección del santo.

A primera hora de la tarde daba comienzo el breve recorrido procesional, una vez concluida la misa oficiada por Agustín Chillón en la iglesia de la Inmaculada Concepción y después de que los fieles devotos adoraran la reliquia del santo. Con un pequeño recorrido alrededor de la iglesia marchaba el desfile retornaba de nuevo a la plaza donde poco antes de volver a meter la imagen de San Geminiano al interior del templo es costumbre que los cuatro cargadores de las andas coloquen la imagen en el centro de la plaza, dando así posibilidad de que los participantes puedan cumplir con la tradición de buscar la protección del santo desde bien pequeños.

Hasta Jambrina se desplazaba el vicepresidente de la Diputación Provincial Aurelio Tomas, el presidente de la Mancomunidad Tierra del Vino Ángel Sánchez y alcaldes de la comarca quienes acompañaban al alcalde Rafael Calvo y la corporación, durante los actos festivos que se celebraban ayer sábado, sin bien la onomástica del santoral sitúa la fiesta el último día del primer mes del año