En los últimos 15 días Ángel Montecino ha perdido una vaca, una novilla y le han desaparecido dos terneros por ataques de lobos en el término de El Coto de Calabor. Ayer moría la cría de la vaca, de raza leonesa, poco más de un mes de vida, que eleva a cinco los animales desaparecidos. "Las vacas me han traído de cabeza" afirma este ganadero que tiene una explotación de 118 animales, por el extraño comportamiento de los animales, ante la presencia del lobo.

El afectado reclama que el Coto de Caza se haga responsable de los daños, ya que la fechoría del lobo ha sido en terrenos del coto cinegético y no corresponden a la Reserva Regional de Caza de la Sierra de la Culebra, ya que Calabor tiene parte de su término local en la demarcación de la Reserva. Las sospechas del propietario saltaron cuando la vaca no volvía a la zona donde estaba el ternero, cuando lo normal es que la madre no abandone a la cría en los primeros meses de vida. Cuando buscaba la vaca aparecieron los restos de otro ternero y posteriormente la nodriza mordida.

Los responsables de Medio Ambiente de la zona visitaron ayer la nave donde ha guardado los restos de los dos animales, mientras todavía busca a los otros dos terneros de los que no hay rastro. Por la tarde, poco después de las tres, encontraba dentro de la nave sin vida el ternero que se quedó sin madre.

Ángel Montecino sospecha que "se está cebando al lobo al pie de las vacas" cerca de los prados de la Virgen de Santa Bárbara porque en esa zona ha encontrado algunos restos de carne. El problema que se presenta es que los lobos centren sus ataques en el ganado vacuno. Durante años tuvo un semental que mantenía a raya cualquier incursión, pero ahora tiene otro toro que no tiene defensas para hacer frente a la manada. El afectado reprocha que "se hace más caso a los lobos, los ciervos y los jabalíes que a los ganaderos".

Solicitud de la Junta

Por otra parte, el consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, confirmó ayer que la Junta pedirá al Ministerio que solicite a Europa "el cambio de régimen" del lobo pase para que esta especie pase de ser protegida al sur del Duero a "gestionable", lo que "permitirá manejar mejor la población y evitar ese contacto tan dañino que está teniendo con la ganadería" informa Ical. La petición se realizará en la reunión de Suárez-Quiñones con la ministra Isabel García Tejerina, el próximo 22 de diciembre.

El responsable regional señaló que los ataques son "incesantes" y los ganaderos "no quieren que les indemnicen, quieren que no se le causen daños, lo que va a ser imposible porque el lobo convive en el mismo medio que la ganadería extensiva, que es el monte". Por ese motivo, la Consejería aboga no por hacerlo desaparecer pero sí "por erradicarlo".