Las empresas se podrán implantar en Roales sin problemas para obtener todas las licencias pertinentes, ya que la Junta de Castilla y León ha concedido el uso excepcional del suelo para fines industriales, de forma generalizada, a todas las zonas del municipio que ya albergan empresas, como son el Corredor, la carretera de Valcabado -donde se encuentra Freigel Food Solutions-, la Cañada de Villanueva -donde ya están implantadas Bernabé Campal y una planta de embutidos- y la salida del pueblo en dirección a Montamarta por la Nacional 630.
Esta "bula" de la Junta dará seguridad jurídica a los empresarios después de que el pasado 17 de octubre entrara en vigor una orden de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente por la que se revertía la condición "urbanizable" de 71,6 hectáreas de terreno de este municipio, que volvían a ser suelo rústico -lo mismo sucedía en otros 146 municipios de la región-. De hecho, la nueva auotrización agiliza los trámites para las empresas que deseen instalarse a partir de ahora en cualquiera de estos cuatro sectores del municipio, ya que antes de la reversión se trataba de zonas urbanizables, que no urbanizadas, y cada nueva construcción requería su propio permiso de uso del suelo para fines industriales, algo de lo que ahora gozarán de forma automática todas las compañías después de presentar un informe de impacto medioambiental.
A este respecto se ha pronunciado la alcaldesa de Roales, Berna Miguel, quien felicita a la Junta por esta decisión "que permitirá que no se frene el desarrollo del municipio", después de que el próximo mes se ponga en marcha el nuevo colector de la carretera de Valcabado que terminará por fin con el sempiterno problema de saneamiento de las aguas residuales. Además, a medio plazo el pueblo ampliará la potencia de su red eléctrica para ser más atractivo para las industrias. La presidenta de la Diputación de Zamora, Mayte Martín Pozo, confirmaba a la prensa el pasado 3 de noviembre que "hay buena disponibilidad por parte de Iberdrola" en unas negociaciones en las que la Institución Provincial ejerce como mediadora.
La regidora considera que la nueva situación garantiza que cualquier empresa obtenga licencia para instalarse en el municipio, ya que "antes de llegar nosotros, a unas se les concedía y a otras no, no sabemos en base a qué criterio porque parece arbitrario", afirma Berna Miguel disparando contra su predecesor en el cargo, el popular Miguel Ángel San Martín Pecharromán, que hace unos días emitía un comunicado culpando al actual equipo de gobierno local de que la Junta "prive al municipio de todos los sectores industriales", y en el que también exponía su preocupación "por la desaparición de cuatro sectores residenciales". La nueva alcaldesa insta a San Martín a "ser honesto" ya que dichas zonas "no eran industriales ni residenciales, no habían pasado de urbanizables porque nunca se desarrollaron pese a que tenían esa condición desde 1998".
Por otro lado, en dicho comunicado el Grupo Popular en el Ayuntamiento de Roales vertía una serie de acusaciones sobre el "equipo de gobierno de Adeiza-PSOE" acerca de supuestas ilegalidades, favoritismos y nepotismos. La regidora anuncia que "desde el Grupo Municipal de Adeiza exigiremos, en el próximo pleno ordinario, que el Grupo Popular se retracte, y si no lo hace le invitaremos a que haga una acusación formal", ya que en la nota no da nombres ni menciona hechos concretos. Aun así, Miguel afirma que "no descartamos emprender acciones judiciales".
La concesión del uso excepcional de suelo rústico para fines industriales fue solicitada a la Junta desde el Ayuntamiento de Roales para facilitar la implantación de las empresas en la nueva situación urbanística del municipio. No obstante, desde el equipo de gobierno creen que es necesario adaptar la normativa municipal a esta realidad, y trabajan en una nueva normativa de urbanismo que convierta definitivamente las cuatro zonas citadas -que ya albergan varias empresas- en industriales, y que según sus previsiones "estará en vigor dentro de dos años". Aunque el municipio también perdió varias hectáreas de suelo susceptible de convertirse en zona residencial, desde el gobierno local consideran que "hay suficiente suelo urbano disponible" para construir viviendas, "a lo que el Ayuntamiento no pondrá ninguna traba". Lejos quedan los anhelos del exalcalde Miguel Ángel San Martín de construir "un nuevo pueblo" en el término de Roales -era la época del "boom" inmobiliario-, para lo que declaró urbanizable más de 700.000 metros cuadrados de suelo, que ya no tiene tal condición porque el "nuevo pueblo" nunca llegó a hacerse realidad.
