Un incendio forestal surgido en la tarde de ayer en la sierra sanabresa obligó a la Junta de Castilla y León a movilizar un amplio despliegue de medios que frenaran su propagación, ya que alcanzó el nivel 1 de peligrosidad, según informaban desde la Consejería de Fomento y Medio Ambiente.
El fuego se declaró a las 16:38 horas en territorio del término de Cobreros. A esa hora surgía entre las montañas una gran columna de humo que era visible desde buena parte de la comarca, aunque la rapidez con la que actuaron lo especialistas hizo que el humo desapareciera en pocos minutos. Sin embargo, las labores de extinción continuaron durante toda la jornada, hasta ocho medios aéreos llegaron a trabajar al mismo tiempo provocando un ajetreo en los cielos que sorprendió a todos los sanabreses, "los aviones y helicópteros bajaban a cargar agua al Lago y subían hacia la sierra", relata un vecino de Sotillo, una de las localidades próximas a la zona incendiada, aunque "desde aquí no se llegaron a ver las llamas, está en la montaña". La misma experiencia vivían en Limianos o en Cobreros.
Este incendio obligó a desplazarse a un helicóptero de Rabanal del Camino (León), uno de Villardeciervos, uno de Rosinos de la Requejada, dos de Tabuyo del Monte (León) y un helicóptero de coordinación, un avión anfibio llegado desde Torrejón (Madrid) y un avión de carga en tierra de Rosinos de la Requejada, además de tres cuadrillas de especialistas en la lucha contra incendios forestales, una brigada de refuerzo, dos cuadrillas de tierra, una unidad de meteorología y transmisiones y una autobomba. El dispositivo estaba bajo la coordinación de tres agentes medioambientales y dos técnicos.
La jornada de ayer era especialmente peligrosa para la propagación de los incendios, debido al viento que soplaba de forma moderada, y que podía ayudar a extender las llamas. Al cierre de esta edición el fuego permanecía activo, según informaban desde la Junta.
