Los cerrajeros y forjadores de la comarca han comenzado a recibir la visita de los alcaldes y algunos vecinos interesándose por los precios de verjas de hierro para ventanas y puertas. Nadie oculta que "el miedo es libre" y que "ante la oleada de robos habrá que ir tomando medidas, no será fácil evitarlos, pero hay que ponérselo difícil". Se dio el curioso caso ayer de un vecino que se presentó interesándose "por construir unas verjas, como las que hacían antes los herreros de los pueblos, con hierro del gordo. Una de dos, que sólo las pueda abrir yo con las llaves o quien lo intente que tenga que hacer tanto ruido con la radial que despierte a todo el pueblo".

La tabaresa iglesia de Santa María es el único templo de la zona que cuenta con un moderno sistema de seguridad, ya que alberga en su interior el Centro de Interpretación de los Beatos. Desde otros pueblos se han interesado por su coste y funcionamiento con vistas a instalar sistemas similares en sus iglesias. En algunas localidades hay vecinos dispuestos a poner el dinero de su bolsillo.