Ciento veinticinco euros al semestre costará la licencia para poder ejercer la venta ambulante en Moraleja del Vino, según la ordenanza aprobada por el Ayuntamiento que acaba de entrar en vigor. El Ayuntamiento exige a los ambulantes IAE y la Seguridad Social y además pagar la tasa por ocupación de la calle, entre otros requisitos.

La venta ambulante se podrá ejercer en la Plaza Mayor los viernes de 9.00 a 14.00 horas. Además el Ayuntamiento podrá autorizar mercadillos y mercados ocasionales o periódicos en otras ubicaciones o fechas con ocasión de eventos o fiestas populares.

Para la venta de productos alimenticios la ordenanza de Moraleja exige el cumplimiento de las condiciones sanitarias, higiénicas o de transportes que exija cada género, además del carnet de manipulador de alimentos.

Acabado el mercadillo los vendedores deberán dejarlo recogido y limpio. La ordenanza establece un cuadro de sanciones que van de leves, que acarrean multas de un máximo de 750 euros; graves, penalizadas con 1.500 y muy graves hasta tres mil euros. Cuando la sanción lo sea por la forma de actividad comercial que se realiza o por los productos comercializados, las sanciones comportarán la incautación y pérdida de la mercancía objeto de la actividad comercial de que se trate. A la tercera sanción muy grave se podría decretar el cierre de la empresa por un año.