La Alianza convoca una protesta el día 29 para exigir medidas de control del lobo

Las tres lobadas consecutivas, dos en Moral de Sayago el pasado fin de semana y otra en el vecino pueblo de Abelón el lunes, sumadas a las que se han venido sucediendo en la comarca de Sayago en los últimos meses están colmando el vaso de la paciencia del sector ganadero.

Sobre estos episodios ayer era preguntado el delegado de la Junta, Alberto Castro, quien tras expresar "todo mi apoyo a los ganaderos ante los ataques repetitivos" del lobo, aseguró que "llevamos más dos meses intentando eliminar ejemplares por el entorno de Sayago". Después precisó que, "de momento", la autorización es para abatir un lobo "y después ya se verá".

"El lobo tiene un recorrido muy amplio y los técnicos de la Junta, con la motivación contrastada de los ataques repetitivos, tienen autorización para actuar. Pedimos paciencia porque no hay otra solución que actuar nosotros para reducir ese daño". A pesar de los continuados episodios en explotaciones de Sayago, el delegado de la Junta aseguró que la incidencia es menor que otros años. "Vemos el cómputo global de los ataques de los últimos años tenemos menos ataques que hace cinco años o que hace cuatro, pero comprendo que para aquel que lo sufra no le sirve de motivación".

Alberto Castro recordó que la proliferación de ataques en la comarca de Sayago, es decir al sur del Duero, está catalogada como territorio donde el lobo es especie protegida, "no porque lo diga la Junta, lo establecen el Ministerio y la Unión Europea". Apuntó también que la Junta "está intentado cumplir los cupos cinegéticos en la zona norte, y en la zona sur actuar aunque no siempre es fácil y la guardería está intentando eliminarlo. Tenemos autorización para matar un lobo y luego ya veremos pero llevamos dos meses y no somos capaces".

La Alianza Upa-Coag exige, una vez más, y así lo volverán a reclamar en la protesta del día 29 de abril, un "control riguroso" de la actual población de lobos, y que no se permita el asentamiento de manadas en las zonas tradicionalmente no loberas. La organización insiste también en las "indemnizaciones justas y directas" a los ganaderos por parte de la Junta de Castilla y León y por la totalidad de los daños ocasionados por el lobo y en todas las comarcas zamoranas.

La Alianza Upa-Coag reclama también "un control de las poblaciones de jabalíes, ciervos, conejos en autovías que constituyen una plaga que dañan nuestros cultivos, así como también de buitres y ciervos que provocan ya importantes daños en el ganado". Los ganaderos reclaman que el Servicio Territorial de Medio Ambiente exija a los titulares cinegéticos el "cumplimiento riguroso" de los planes cinegéticos, "porque la alta densidad de fauna provoca el incremento de daños en cultivos y numerosos accidentes de tráfico".

Se quejan de que la Administración regional "hasta la fecha no ha ofrecido respuestas adecuadas a una problemática derivada de los múltiples daños ocasionados por la fauna silvestre" que "están soportando los agricultores y ganaderos zamoranos".