Un "conflicto" en el volcado de datos entre la compañía de seguros Axa y la Dirección General de Tráfico ha originado el problema con la flota de vehículos oficiales de la Junta de Castilla y León, que han permanecido desde el día 1 de abril en una situación anómala, pues aunque contaban oficialmente con un seguro, no cumplían con el requisito obligatorio de aparecer en el Fichero Informático de Vehículos Asegurados (FIVA). Esto significa que a efectos legales los coches carecían de cobertura de seguro.

Y esa fue la razón por la que el vehículo del Servicio Territorial de Sanidad que el pasado martes sufrió un accidente urbano en Zamora fue multado por la Policía Municipal con una sanción de 1.500 euros por circular sin seguro. Ese hecho fue también el desencadenante de la inmovilización de los coches oficiales del Servicio y de la alerta generada en todas las consejerías ante la posibilidad de que sus vehículos estuvieran en la misma situación. Los trabajadores recibieron esta noticia con perplejidad y preocupación ante las consecuencias que se podrían haber derivado de un accidente más grave que el que encendió la bombilla.

Preocupación que ayer estuvo plenamente vigente, a pesar de que desde la Delegación Territorial de la Junta en Zamora se aseguraba a media mañana que "todos los vehículos están funcionando con normalidad". La realidad era bien distinta, pues en el Servicio Territorial de Sanidad no se recibió la orden de circular con normalidad hasta la una de la tarde. De tal forma que ayer los coches prácticamente no se movieron, se suspendieron las salidas de por la mañana y no pudieron realizarse servicios programados.

Y hacia las dos de la tarde las oficinas comarcales de Medio Ambiente recibían la comunicación de que no se movieran los vehículos, incluido todo el parque de carrocetas y maquinaria contra incendios, a no ser una situación de emergencia. Una paralización que duró aproximadamente cinco horas, hasta que pasadas las siete de la tarde se comunicaba que el seguro estaba en regla. Al parecer fue una medida de precaución en tanto se garantizaba la "legalidad" de los vehículos.

Y algo parecido ocurrió en la mayoría de los centros de salud rurales, donde a mediodía se recibía la misma comunicación de no mover los coches oficiales. Como alternativa se apuntó que se utilizaran las ambulancias de soporte vital básico e incluso en algunos centros se indicó que usaran sus coches particulares (se les pagaría el kilometraje), un taxi o si fuera necesario recurrir a la Guardia Civil con el fin de que no se dejara desatendida ninguna emergencia.

Pilar del Olmo, titular de la Consejería de Hacienda a la que compete la contratación de los seguros de la flota de vehículos oficiales, restó ayer gravedad a la situación del parque móvil de la Junta. Explicó que el 31 de marzo venció el contrato con la anterior aseguradora, "que decide no prorrogar y lo comunica con un plazo muy breve. Nosotros contratamos con otra compañía y en ningún momento hemos estado sin seguro porque el 1 de abril todos los coches de la Junta lo tenían". Pilar del Olmo justificó el incidente porque "como hay bastante coches de servicio público la compañía tiene que dar parte a Tráfico de la relación de vehículos y ha tardado un poco más de la cuenta". La consejera de Hacienda aseguró que "entre hoy (por ayer) y mañana (por hoy) estarán ya todos (en regla)".

Sobre las seis de la tarde de ayer, la compañía Axa confirmaba a este diario que los datos de la totalidad de los vehículos de la Junta estaban ya "volcados en el FIVA" con sus respectivas matrículas. Justificaban el problema por "el gran volumen de vehículos (más de tres mil) a registrar; es una flota muy grande y el departamento correspondiente ha tardado más tiempo en volcar toda la información pero los coches han tenido cobertura desde el primer momento".