Militantes y simpatizantes de Izquierda Unida salieron ayer a la calle en Moraleja del Vino para reivindicar la reversión al municipio, de las casas del cuartel de la Guardia Civil, para su rehabilitación y destinarlas a viviendas dignas mientras que la parte de abajo donde estaban las oficinas se habilitarían para fines sociales
"La idea es que si el Ministerio del Interior no está dispuesto a que el puesto de la Benemérita vuelva desde Arcenillas a la localidad donde permaneció más de un siglo se pueda recuperar esta dotación. Las casas carecen de interés para la Guardia Civil por su proximidad con el Cuartel de Zamora donde existen viviendas deshabitadas" argumentaba Dimas Ramos, concejal de IU en el Ayuntamiento de Moraleja del Vino, quien marchaba tras la pancarta acompañado del procurador de las Cortes de Castilla y León José Sarrión, el ex-diputado Francisco Molina o concejales de otras localidades como Manuel Burón de Benavente. "Quiero expresar con mi presencia el apoyo completo a esta iniciativa del concejal y simpatizantes de Moraleja porque es una reivindicación social frente a la privatización destinada a aumentar la dotación municipal" explicaba José Sarrión.
Al excuartel de Moraleja del Vino que ahora esta operativo en Arcenillas están adscritos otras localidades de la zona como Villalazán, Sanzoles, Arcenillas, Casaseca de las Chanas, el Piñero, Jambrina, Gema, Madridanos y Moraleja del Vino.
Fue el pasado año cuando este puesto se trasladó a Arcenillas debido al deterioro que presentaban las instalaciones de Moraleja.
Acabada la concentración, la visita continuó por la calle Infanta Cristina, edificio de usos múltiples, guardería y el colegio, denunciando "la pasividad del Ayuntamiento, ya que aún no se han llevado a cabo los acuerdos aprobados en Pleno y que datan de septiembre de 2015", entre ellos el cambio de nombre de la primera calle por el de la pedagoga republicana Justa Freire.
