Los Carochos de Riofrío de Aliste han dado la bienvenida al Año Nuevo con una mascarada pura de invierno que, declarada Fiesta de Interés Turístico Regional de Castilla y León en 2002, regresa cada día 1 de enero a los orígenes.

Los once personajes, «Diablo Grande», «Diablo Chiquito», «Gitano», «Filandorra», «Molacillo», «Ciego de Atrás», «El del Tamboril», «Cerrón», «Madama», «Galán» y «El del Lino» cumplieron su cometido poniendo en escena, magistralmente, con sabiduría las costumbres heredadas y aprendidas de sus padres y de sus abuelos.

La salida del Diablo Grande y del Diablo Chiquito fue uno de los momentos álgidos de la mascarada bajo el amenazador ruido de las tenazas de escalera abriendose y cerrándose, calle abajo, camino de la antigua Casa del Cura, bajo la intensa humareda y el peculiar olor a azufre quemado. El claretiano Benicio Rodríguez fue el encargado de bautizar al niño y a partir de ahí peleas y buenos deseos llenaron durante todo el día el pueblo de Riofrío.