El arciprestazgo de Aliste y Alba cuenta actualmente con un total de 84 parroquias que agrupan a 9.811 feligreses atendidos por solamente ocho sacerdotes en activo. Ello supone que cada cura tiene que atender a una media de 1.226 personas. El problema está en la despoblación y la dispersión territorial que lleva a párrocos como Teófilo Nieto Vicente, residente en San Juan del Rebollar y profesor de religión en el Instituto Aliste, a tener que encargarse de 15 pueblos. Catorce atiende el cura de Valer de Aliste, Fernando Lorenzo, que además es el responsable de Cáritas Aliste y director del campamento diocesano "Como Enanos". El mismo número atiende en la Tierra de Alba el veterano Timoteo Marcos. Uno de los curas históricos de la zona es Marcelino Gutiérrez, de Mahíde, que durante décadas compartió la labor evangélica con la construcción, con 9 pueblos.

Pocos curas y muchos pueblos es un binomio difícil, lo cual lleva a que en épocas como Semana Santa o Navidad no se puedan desarrollar los actos religiosos en todas las localidades a pesar del esfuerzo y buena voluntad de los curas. Una de las alternativas, caso de la Vigilia Pascual de Sábado Santo es celebrarla cada año en una de las parroquias de la Unidad de Acción Pastoral, desplazándose la feligresía. EN Noche Buena la Misa de Gallo se desarrollará en muy pocos pueblos.

Los parroquias con menos feligreses son Villarino Cebal con 4, San Pedro de las Herrerías (14), Villaflor (15) Flechas y Vega de Nuez (17), Villarino Manzanas (19) y Santa Ana (23).