El Ayuntamiento de Fariza concedió ayer "el derecho de superficie" a la empresa Rodsel Group para implantar en el municipio una piscifactoría de salmones que será "la primera en el mundo" en expresión del director de la sociedad Santiago Rodríguez, que además se acercó ayer a la localidad de Arribes del Duero para presentar de primera mano un proyecto valorado nada menos en "60 millones de euros".

La Corporación de Fariza adjudicó esta disposición de terreno a la empresa salmonera con el voto favorable de los cinco representantes del grupo socialista, la abstención del concejal de Ciudadanos y la oposición de la edil del partido popular.

El paso dado por el Ayuntamiento presidido por Manuel Ramos permitirá ahora a la sociedad Rodsel Gruop impulsar la tramitación ante los diferentes organismos e instituciones para obtener las correspondientes autorizaciones y licencias administrativas que permitan cimentar sobre el terreno el complejo industrial y productivo.

Santiago Rodríguez anunció el inicio de las obras para finales del próximo verano, una vez obtenidos los correspondientes permisos burocráticos.

El proyecto y funcionamiento de las instalaciones piscícolas fue explicado al Equipo de Gobierno con detalle y mediante una proyección en la pantalla del ordenador. Fueron casi dos horas de conversaciones donde se habló de las características del proyecto así como de las condiciones concernientes a ambas partes. Cuando esté a pleno funcionamiento el complejo de la piscifactoría el número de trabajadores estará "entre 150 y 175" según precisó ayer el manager director de Rodsel Group, que hizo alusión a la diversidad de especialistas y personal que exige el desenvolvimiento de una industria de esta naturaleza, marcada por su carácter ecológica.

El alcalde del municipio, Manuel Ramos, además de expresar su agradecimiento a la empresa por elegir Fariza como escenario para la ubicación de una iniciativa tan prometedora y sobresaliente, consideró este proyecto empresarial como "a respuesta a una demanda del municipio. "Para Fariza es una lotería que ha tocado, que significará un cambio no solo demográfico, sino también de economía y de servicios". "Para dar luz verde se ha valorado todo", añadió el regido, que apuntó que en una balanza se habían puesto los pros y los contras y resultaban de mucho mayor peso los beneficios.

El proyecto salmonero de Fariza ha causado sensación por el importe de la inversión, por el número de empleos y por la naturaleza de la crianza. "Toda la tecnología será israelí" indicó ayer Santiago Rodríguez, que destacó que Israel es el país pionero en la construcción de piscifactorías.