Al igual que hacían hace pocos días los vecinos de la zona de Villalpando, un nutrido grupo de sayagueses ha creado la Asociación en defensa de la sanidad pública de Sayago, para denunciar las deficiencias del servicio en esta zona de la provincia.

La entidad, que hoy se ha constituido legalmente, está liderada por Prudencia Garrote, vecina de Monumenta, Lorenzo Ferrero, de Gáname, y Manuela Andrés de Bermillo, e Iván Pascual, de Tudera. Los tres han explicado hoy en Zamora los problemas que sufren cada día cuando necesitan la atención de un médico. "No hay profesionales y los pocos que hay están por las carreteras. Vas a la consulta y te encuentra un papelito, el médico a tal hora, pero raramente se cumplen los horarios".

La comarca perdió dos facultativos durante la primera reestructuración sanitaria, y temen que la Junta de Castilla y León amortice otras dos plazas el próximo año. "No descansaremos hasta ver escrito en el boletín que se anula la reestructuración, no nos valen las palabras", asevera Prudencia. Esta mujer de más de 70 años ha experimentado los efectos de los recortes en sus propias carnes, "en el verano necesitaba inyecciones y era yo la que tenía que ir detrás del ATS todos los días a Moralina, a Moral, a Luelmo, a Bermillo... dependiendo del pueblo en el que tocara consulta".

A parte de que el personal es escaso, según denuncia la asociación, no se cubren ni las vacaciones ni los descansos que le corresponden a los médicos después de cada guardia, por lo que los compañeros se tienen que hacer cargo de sus pueblos y los de sus colegas, "esi genera retrasos y en ocasiones la anulación de la consulta", lamentan. "La mayoría de las localidades no cuentan con horarios de consulta todos los días, por lo que una anulación puede suponer hasta una semana sin que un médico pase por all", afirman.

El Movimiento en Defensa de la Sanidad Pública realizó una reunión informativa ayer en El Puente de Sanabria, "aunque no había mucha gente, eran vecinos muy movilizados y guerreros", explican Jerónimo Cantuche y Carlos Pedrero.