La Unidad de Gestión Micológica "Montes de Zamora" ha mantenido un vacío legal que ha obligado a los recolectores de setas de los pueblos a la recogida, en teoría "ilegal", ya que nadie, ni Micocyl, Cesefor o ayuntamientos, les concedían los permisos. La campaña, en este caso la 2015-2016, según la normativa especifica, comenzó coincidiendo con el 1 de agosto y se extiende hasta el 31 de julio del próximo verano. Sin embargo en agosto y en septiembre, concretamente hasta mediados de octubre, nadie expidió ni un solo permiso. En el caso de la expedición de permisos online de recolección de setas para la provincia de Zamora -fue la primera posibilidad de obtener uno-, se inició con 77 días de retraso, el pasado 16 de octubre. En cuanto a los expedidos en mano por los ayuntamientos, donde se sacan la mayoría -entre otras cosas porque en la zona oeste no hay internet o la cobertura es nefasta-, la cosa aún ha sido peor pues se empezaron a entregar este pasado lunes. El vacío legal llevó a los recolectores a tener que salir al campo portando el carné de la campaña anterior -quien lo tenía-, mostrándole dicho documento a los agentes que, obviamente no les multaban, pues conocían la incongruente y anómala situación.

Parte del problema surge, así lo reconocen los alcaldes, al acordar crearse a mediados de septiembre, ya en plena campaña, el Área de Recolección Regulada "Montes de Zamora", agrupando en una las antiguas dos unidades de gestión de Aliste, Tábara y Alba y Sanabria-La Carballeda. Hubo que seguir unos trámites y tres ayuntamientos se retrasaron con la documentación originando el problema para la actualización del territorio, que ahora agrupa un total de 27.769 hectáreas con previsiones de una producción media anual sostenible de 55.932 kilogramos y un numero máximo de 2.909 recolectores (permisos).