Catorce ovejas muertas es el saldo de un ataque de lobos esta madrugada en una explotación de Moraleja del Vino, situada a unos dos kilómetros del pueblo. Fueron los propios ganaderos los que esta mañana descubrieron los cadáveres de los animales esparcidos por las inmediaciones de la nave, en el cercado donde tenían unas ochocientas cabezas de ganado.

Felipe Álvarez, uno de los ganaderos de esta explotación familiar, denuncia la "indefensión ante la que nos encontramos, encima de lo sacrificado que esto no puedes ni vivir tranquilo". Asegura que hace quince días otro ganadero de la zona, en Gema del Vino sufrió el ataque de lobo que se llevó por delante a una decena de ovejas.