A 36.600 euros asciende la deuda que mantienen varios propietarios de terreno con la Comunidad de Regantes Virgen del Aviso. "Son agricultores que ya no ejercen como tales, las fincas han pasado por herencia a familiares que tampoco se dedican a su explotación y en algunos casos se pierde la pista del titular", explica Carlos Macías Laperal, el presidente.

Ante esta situación, la Comunidad de Regantes ya ha aprobado durante la última asamblea la vía de apremio para solicitar el abono de esta suma mediante vía judicial para que los representantes legales de la agrupación intenten recaudar lo que deben a los morosos. "Es una cantidad que repercute y encarece a los demás partícipes de la Comunidad Virgen del Aviso" precisa Macías Laperal.

En el orden del día de la asamblea celebrada en Moraleja del Vino los labradores establecieron el precio que se cobrará por hectárea durante la campaña de riego que alcanzará los 0,045 euros por metro cúbico de agua y un máximo de siete mil metros cúbicos por hectárea. El regante que pase de este consumo abonará tres veces más el exceso.

En estos momentos las previsiones son buenas ya que los embalses se mantienen en el 80 por ciento de capacidad y no se teme que haya problemas para la campaña de riego que se iniciaba en marzo y en la que sobresale el cultivo de trigo y de alfalfa, que vienen a sustituir al maíz, uno de los cereales mayoritarios hasta ahora en la zona de Virgen del Aviso.

En la reunión se aprobó también la cuenta de 2014 y se informó de las negociaciones que mantiene la agrupación con Ferduero para la compra de energía eléctrica lo que ha supuesto un ahorro del 30 por ciento, "pero curiosamente el gasto ha sido mayor respecto al año anterior, porque se ha consumido muchísima electricidad". Así, se ha pasado de una factura en 2013 que asciende a 367.320 euros a la de 399.292 euros en el ejercicio de 2014.

El apartado de mantenimiento y seguros es otro de los asuntos importantes para la financiación de la comunidad de regantes, ya que dos de las cinco bombas de la estación elevadora instalada en el Duero "se estropearon y ha habido que repararlas".