Los vecinos de Villalba de la Lampreana celebraron ayer una procesión en honor de santa Filomena, mártir de gran devoción en esta localidad terracampina. Tras la santa misa los devotos pudieron adorar la reliquia de la santa que traída desde Italia en 2010.
La arraigada devoción a esta santa en Villalba de la Lampreana se remonta a hace más de 2 siglos, si bien, la devoción a santa Filomena no siempre ha corrido buenos tiempos, más cuando el propio Vaticano la eliminó del santoral porque no se sabía nada de ella, sino que se mantenía por la tradición cristiana que contaba que había existido la santa y el tipo de martirio que había tenido, hasta que unas excavaciones en las catacumbas de Santa Priscila en Roma en 1802 encuentran su sepulcro y se restituye en el santoral el día 11 de agosto. Villalba de la Lampreana celebra la festividad el segundo domingo de Pascua, domingo de la Misericordia.
El hallazgo reveló que la tumba contenía un esqueleto que era de huesos pequeños y notaron a la vez que su cuerpo había sido traspasado por flechas. Al examinar los restos los cirujanos atestiguaron la clase de heridas que la joven mártir recibió y los expertos coincidieron en calcular que la niña fue martirizada entre la edad de 12 o 13 años. Por el entusiasmo que causaba en los primeros cristianos la valentía de los que morían por la fe, acostumbraban a marcar la losa con el signo de la palma, y ponían al lado un pequeño frasco que contenía la sangre del mártir. Los huesos, cráneo y cenizas junto con el frasco que contenía la sangre fueron depositados en un ataúd, el cual fue cerrado y triplemente sellado. Bajo guardia de honor el ataúd fue llevado a la custodia del cardenal vicario de Roma a una capilla donde se guardan los cuerpos de santos.
Documentación
La idea, en el año 2010, de traer la reliquia a la localidad, comenzó tras iniciar los contactos con Mugnano, localidad italiana, próxima a Nápoles donde fueron llevados los restos en 1805 y de la cual es patrona la citada santa. Los villalbeses se pusieron en contacto con el obispo de Mugnano mostrando su conformidad de inmediato, ya que en Sudamérica hay mucha devoción a santa Filomena, intercesora especialmente en los dolores de cabeza, pero en España prácticamente no se conoce en ningún lugar.
Para acreditar la devoción de Villalba a santa Filomena enviaron a Italia la historia, fotografías, datos e información de la cofradía de la santa y mártir existente en el pueblo y a la que pertenecen todas las niñas de la localidad, ya que son apuntadas nada más nacer porque a santa Filomena la martirizaron siendo muy niña. Tras cerca de dos meses de comunicación epistolar con Mugnano el obispo italiano envió una reliquia junto con una carta que está expuesta junto al pequeño sagrario donde reposa, debajo de la Virgen del Rosario. Así desde hace ya cinco años la iglesia de la Asunción custodia unos pequeños restos del cuerpo de la santa que se veneran durante la celebración de la festividad y durante la procesión las mayordomas portan unas llamativas palmas. Es tradición en la localidad que ese día se realice también la bendición de las llamadas "rosquillas de santa Filomena" que no faltan en ninguno de los hogares, mientras que en Italia y Sudamérica se realiza la bendición de aceite puesto que en su sepulcro apareció un frasco licuado de aceite y es símbolo de protección.
