Al menos siete iglesias de la comarca de Sayago fueron objeto de robo durante la noche del domingo al lunes en una espectacular operación que permitió a los ladrones irrumpir a su antojo al interior de los templos, aunque fueron muchos más los daños que causaron que el valor de lo sustraído. La Guardia Civil investiga los hechos que han provocado gran intranquilidad en los pueblos, muchos de ellos habitados por muy poquitos vecinos y en general muy mayores.

En el caso de las iglesias el «modus operandi» ha sido el mismo. Entraban al templo forzando las cerraduras de la puerta principal y con el único objetivo de llevarse el dinero de los cepillos y lampadarios. La escasa población que habita en algunos pueblos hace que las cantidades sustraidas en alguna de las parroquias haya sido puramente testimonial; «no más allá de 15 euros», comentaba uno de los párrocos.