El presupuesto del Ayuntamiento de Lubián asciende a 724.250 euros para esta anualidad. Esta cantidad que se desglosa en el capítulo de gasto aprobado contrasta con el capítulo de ingresos que asciende 972.459 euros, superior en 248.209 euros.

Este desfase entre recaudación y gasto se debe al "techo de gasto", con cuya aplicación está en desacuerdo el alcalde, Felipe Lubián Lubián, y la corporación. Establecer desde el "Ministerio Montoro" las condiciones a cumplir para autorizar el remanente municipal "es una merma de la autonomía municipal. Son los ciudadanos los que deciden dónde se invierte el dinero y no Montoro". El alcalde se preguntó "cómo se justifica que el cambio de una canalización, la mejora de un servicio público, no da pérdidas. Cuando para una ayuntamiento es una inversión para garantizar el servicio".

En estos tres años de contingencia municipal "hemos ahorrado hasta ahora el equivalente a un presupuesto" que se podría invertir en hacer una pequeña residencia de 25 plazas para los mayores. Aquí surge otro problema al reducirse competencias municipales y eliminar los servicios sociales que dependen ahora de la Diputación.

La injerencia de la administración central coarta proyectos como éste, de la residencia, ya que tras consultar "nos obligan a hacer una residencia de 50 plazas porque una residencia de 25 da pérdidas". Para Lubián los servicios sociales "no tienen que reportar ganancias. No queremos una residencia para ganar dinero".

Un proyecto para 25 residentes sí es asumible para esta alcaldía pero con el doble de capacidad "tendrá que esperar porque se necesitaría ahorrar no el equivalente a un presupuesto, sino a tres". El alcalde reconoce que no es momento tampoco para endeudarse por las circunstancias económicas en general. Lo más viable ahora es un centro de atención de día para los mayores, en consonancia con el comedor social que funciona en el Ayuntamiento.

Lubián criticó que el Gobierno reduzca el déficit público generado por el Estado, las autonomías y los grandes ayuntamientos a costa del superávit y el techo de gasto en los Ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes que redujeron la deuda en un 0,45% en el último ejercicio.

Con todas estas "injerencias" en la autonomía municipal la alcaldía destinará 263.600 euros a bienes corrientes y servicios, otros 176.400 euros a inversiones reales y 122.000 a trasferencias que son los tres capítulos que afectan directamente a la mejora de las prestaciones a los ciudadanos. Otros 161.750 irán destinados al gasto de personal. Las trasferencias de capital son de 500 euros y los pasivos financieros en cero. Como dato significativo solo hay presupuestados 300 euros para todo un año para los miembros de la corporación designados como "altos cargos".

La recaudación de impuesto directos aportará 697.388 euros a las arcas municipales, seguida de la aportación por trasferencias de capital con 156.257 euros. Los ingresos patrimoniales reportan 47.240 euros y 7.923 en concepto de tasas.

Entre los proyectos destacados está el Plan Especial de Obras con 60.000 euros que se destinarán a mejorar redes de servicios y pavimentación respectivamente en Aciberos, Padornelo y Lubián, además de dos obras en la reconstrucción de los hornos en Hedroso y Aciberos.

También está en marcha el proyecto de eficiencia energética con la AECT Duero-Douro que supondrá ampliar algunos puntos de luz en los cascos urbanos del municipio.