Que los ciervos y jabalíes cruzan en ambos sentidos la carretera nacional 631 prácticamente a diario, con el consiguiente peligro para los conductores por su irrupción en la vía, es una realidad sabida por todos los usuarios y habitantes de la zona. En esta ocasión, como se ve en la fotografía, un conductor da fe de la existencia de un verdadero rebaño de ciervas tranquilamente pastando en una finca de Pozuelo. El espectáculo faunístico no pudo menos que llevarle a detener el vehículo para contemplarlo e inmortalizar la visión faunística, que ayer fue más que seguida en los móviles.