Trabazos ha creado un archivo fotográfico con 2.000 estampas de los vecinos y acontecimientos de la localidad desde 1900 a 1979. Un fondos que se incrementará hasta las 5.000 en 2015 gracias a la donación realizada por el vecino Manuel Manzanas, tanto de los archivos propios como los que ha ido recopilando entre sus paisanos.
De esta manera se garantizará la supervivencia de las primeras imágenes tomadas a los hijos de la tierra muchas veces cuando se vieron obligados a a emigrar a Cuba, Brasil, Argentina, Alemania, Francia o Suiza en busca de trabajo o cuando los jóvenes se iban lejos a hacer la "mili" a lugares tan lejanos como Ceuta, Melilla o el Sahara.
La historia del pueblo a través de viejas estampas en blanco y negro ha dado su primer paso con la presentación de libro "Trabazos, nuestra vida, nuestras imágenes", una obra en la cual se recogen alrededor de 400 imágenes de los primeros 79 años del siglo XX, incluso algunas anteriores, auténticas joyas y testigos del paso del tiempo y la vida, que han sido aportadas por 135 familias.
En total se han editado 350 ejemplares con la colaboración técnica y económica del Ayuntamiento de Trabazos que además ha sido el coordinador en la ardua tarea de recogida, selección y digitalización de las fotografías que han salido de maletas y baúles tras dormir el sueño de los justos durante años.
El alcalde de Trabazos Javier Faúndez Domínguez asevera que "como Ayuntamiento nos pareció acertado apoyar esta iniciativa puesto que era una forma de recordar a nuestros antepasados, a muchos de los presentes y revivir en imágenes una forma de vida, la de nuestro pueblo, tan diferente a la actual". E incidió que además del interés que está suscitando entre los mayores, "el libro esta causando un gran interés en nuestros jóvenes pues muchos están viendo por primera vez imágenes de sus antepasados o lugares del pueblo totalmente cambiados de los que conocen".
La obra se ha estructurado abarcando diferentes facetas de la vida y del día a día desde las fiestas, romerías y bodas alistanas, a la emigración y la escuela pasando por las peculiares y a la vez duras tareas del campo antaño con la siega a hoz, el acarreo con carros o la trilla con los trillos de Cantalejo convirtiendo trigo, centeno y cebada en grano y paja en la "parva".
