Circular y caminar por las calles de gran parte de los pueblos de la comarca de Sanabria resultaba complicado ayer a primera hora de la mañana por la presencia de las placas de hielo que se habían apoderado de los suelos. Al temporal del nieve siguió ayer un brusco descenso de las temperaturas y la temida congelación de la nieve y el agua. Las placas de hielo pusieron en alerta a los conductores y, en algunos casos, en serios apuros. Mientras las carreteras de la red vial principal estaban en un estado aceptable de vialidad, la desatención de la red local y urbana fue la tónica general. Los ayuntamientos, la mayoría sin medios propios, escatimaron fundentes y sal para no gastar, a posteriori, en arreglo de calles.

La única carretera cortada ayer por la acumulación de nieve, dependiente de la Consejería de Fomento, era la ZA-103, en el tramo que comunica San Martín con la Laguna de Peces. A primera hora de la mañana hasta seis carreteras de la red regional presentaban problemas por el hielo en los términos de Porto, Pías, Barjacoba, Villanueva, Pedralba y Calabor. Ayer heló sobre mojado. La lluvia y el ligero aumento de la temperatura diurna atemperó la situación y el hielo fue desapareciendo de numerosas carreteras a primera hora de la tarde. No así en los accesos a los pueblos, que si bien están todos abiertos, en muchos casos el paso es por una única rodada.

Un total de 18 alumnos faltaron a clase al no poder completar la ruta de transporte escolar que los debía acercar a su centro. 15 alumnos pertenecían al CEIP de Lubián, Tuela-Bibey, y el CEIP Fray Luis de Granada de Puebla, además de un alumnos del centro de Secundaria Valverde de Lucerna.

Completar las rutas provocó situaciones complicadas. En Santa Colomba de Sanabria uno de los vehículos de la ruta escolar de Puebla tuvo que recorrer dos kilómetros marcha atrás hasta que pudo incorporarse a la Nacional 525. Las placas de hielo de la travesía, desde el barrio del Campo hasta Plaza donde esperaban los niños, provocaron que patinara al vehículo y que no pudiera continuar el camino. La monitora que acompañaba a los escolares recorrió los 200 metros de la calle, convertida en pista de hielo, para recoger a los pequeños y llevarlos hasta el autocar. Guiado por los padres de algunos alumnos, el chofer pudo completar la maniobra de salida, dos kilómetros de curvas, hasta que pudo dar la vuelta y seguir su ruta. Los padres criticaban la falta de medios en el Ayuntamiento de Cobreros para mantener las calles principales con cierta seguridad para la circulación del transporte escolar.

En Palacios de Sanabria la llegada de los escolares también fue accidentada por las placas de hielo a la puerta del centro que provocaron varias caídas de los pequeños al descender del vehículo, objeto de las quejas por parte de los padres por la falta de previsión, en este caso del Ayuntamiento de Palacios.

En buena parte de las rutas los conductores tuvieron problemas para dar vuelta en los pueblos, porque las carreteras estaban relativamente bien, con precaución por el hielo, pero en los pueblos no se habilitaron zonas para poder completar una maniobra de giro.

En Puebla las aceras eran intransitables por el hielo, tras la acumulación de entre 10 y 15 centímetros de nieve que se derritió y se congeló. Los vecinos criticaban la falta de previsión en la tarde del martes por no despejar la nieve de las aceras y reducir el riesgo de formación de placas.

En Aciberos una veintena de vecinos tuvieron problemas con los 30 centímetros de nieve y las placas en las calles que impedía mover los coches, salvo los todoterreno con doble tracción y marchas reductoras, lo que obligó a los trabajadores de las obras del AVE a tener que ir a pie hasta la carretera para poder ir a trabajar, lo mismo que los vecinos que trataban de entrar al pueblo.

Los dos únicos accesos desde la antigua carretera N-525 eran una plancha de hielo. Un vecino, pendiente de atención médica desde el lunes, no pudo ser asistido hasta ayer, porque el servicio sanitario no podía acceder hasta la vivienda. Otros residentes se vieron impedidos para salir más allá de la puerta de casa por el riesgo de caídas. Uno de los ciudadanos trasladaba su malestar porque llevaba tres días sin poder salir del pueblo, a la espera de que apareciera alguna máquina que despejara una entrada. Por no entrar no podía entrar ni el panadero.

El riesgo de heladas nocturnas será una incógnita aunque las previsiones meteorológicas prevén mínimas para hoy de 0,9 grados en positivo, aunque ayer los 1,8 grados bajo cero sí provocó estos problemas en esta población a 1.060 metros de altitud. La zona de la Alta Sanabria ha sido una de las más afectadas por los temporales de nieve que se ha acumulado desde el 3 de febrero. Sigue la previsión alta de precipitaciones en la zona, pero de agua.

En núcleos como Porto, Villanueva de la Sierra y Barjacoba persiste el riesgo de hielo en la primera mitad del día.