El rápido y fuerte crecimiento de los caudales de agua ha provocado el desbordamiento de diversos ríos de la comarca de Aliste y ha llevado a Iberdrola a abrir los aliviaderos de algunas presas, como Villalcampo, para favorecer la evacuación.

Los cauces se han visto desbordados por el agua en las últimas horas debido a las intensas lluvias registradas en la provincia y a la existencia de abundante nieve en las zonas altas que han añadido, merced a las precipitaciones, su aportación. Especialmente desbordados aparecen los cursos de agua de las comarcas Aliste y Sayago, que vierten sus aguas a los grandes ríos de la cuenca zamorana. El encharcamiento de los campos, que no admiten más agua, hace que las escorrentías colmen los cauces y rebosen incluso por encima de los pequeños puentes. De hecho, este crecimiento desmesurado de los regatos afecta incluso a la práctica de la caza al impedir a los cazadores el vadear las corrientes.

La comarca de Aliste se vio colapsada ayer a causa del fuerte temporal de viento y agua que azotó a «La Raya», muy en particular en la madrugada del viernes al sábado, con los desbordamientos en diferentes puntos de los ríos Aliste, Manzanas, Cabrón, Frío, Cebal, Espinoso, «La Manzanal», Mena y Angueira.

El Aliste, fue subiendo su caudal desde su nacimiento en el «Portillo de San Pedro» (Sierra de la Culebra) y comenzaba desbordarse en el casco urbano de Flores tras recibir las aguas del Cebal, en «El Poyal» de Valer. Tras unírsele el Frío y el Mena en Gallegos del Río llegaba a Domez de Alba muy crecido, no entrando ni una gota más por el peculiar e incongruente viaducto de «La Era», en la carretera ZA-P-1405, de Zamora a Mahide de Aliste, donde los vecinos llegaron a temer que contara la vía de comunicación al tráfico.

En Valer de Aliste, pueblo que parte en dos el río Frío, como ya viene siendo habitual cada vez que hay fuerte temporal, sus turbulentas aguas anegaron las zonas urbanas de «Las Eras», «Pradera del Río», «Debajo los Prados» y «La Isla», incluidas las dos calles colindantes al cauce situadas por arriba del puente de piedra, llegando en este caso el agua a las casas.

En la Villa de Alcañices el agua del Angueira no encontró suficiente paso en el cauce y se salió por cortinas, calles y paseos de la ribera cercana al casco urbano. Lo mismo sucedía con el arroyo «La Manzanal» que bordea «La Raya», el cual llegó a saltar por encima del puente de la carretera de la Nacional 122 a Constantim dentro del casco urbano de Moveros, anegando así mismo la calle del centro médico local. En este caso concreto el Ayuntamiento de Fonfría presidido por Jesús Lira del Río, y el alcalde pedáneo de Moveros Julian Martín Mielgo, ya trasmitieron a la Confederación Hidrográfica del Duero la necesidad urgente de limpiar el cauce.

Autoridades y vecinos incidían ayer en la urgente necesidad de que la Comisaría de Aguas de la Confederación Hidrográfica del Duero y los ayuntamientos lleguen a un acuerdo para que los propios vecinos intervengan, sí así lo desean, en la limpieza de las riberas.

En varios pueblos este invierno los vecinos ya han limpiado los cauces de ramas de aliso con la autorización de la CHD. La propia Confederación Hidrográfica ha actuado en los últimos años en la limpieza arbórea en ríos como el Aliste, Frío, Mena, Cabrón y Castrón.

El problema radica en que la escasez de ganadería hace que la maleza en las riberas se regenere de una manera preocupante y contribuyendo a los desbordamientos de los ríos.