El músico y gaitero Manuel Otero Alonso, Madrid 1974, ha presentado su segundo libro de canciones y romances populares de la comarca de Sanabria, obra editada bajo el título «Otras 100» y que completa la primera de sus obras «100 Canciones de Sanabria». Como bien aconseja el autor no es libro solo para tener y leer, sino para hacer un amplio uso musical de él. A cuento viene la anécdota de un gaitero de Sanabria que evoca Otero: «Mira a ver? que la gaita la llevas, pero los dedos quedan aquí». Se dice que Juan Barrio "Ti Gaiterín" de Pedralba de la Pradería advertía con esta frase a todo aquel al que le entregaba una gaita, que él mismo fabricaba artesanalmente. Advertía así el veterano gaitero que no por llevarse un buen instrumento ya se daba por hecho que saldría un buen músico. La obra recoge canciones de cuna, litúrgicas, canciones de ronda, pasacalles y romances, además de bailes completos, corridos, jotas y muñeiras. No faltan las canciones de trabajo y un grupo de composiciones difícil de clasificar.

El autor no pierde la oportunidad de explicar el sentido del "aturrio", incluso cancioncillas con motivo de un brindis, los gentilicios populares y los festivales, grupos musicales y las fiestas y romerías populares donde el folclore tiene mucho que decir y que aprender de las escuelas.

Manuel Otero Alonso, de orígenes sanabreses de Murias y San Justo, recopiló inicialmente unas 250 canciones que fueron habituales en los cánticos de los pueblos de la comarca, algunas todavía se conservan. La raigambre del autor es significativa «todavía fui con la vela del ganado al campo con mi abuelo y con mi padre». La nueva colección recoge cien canciones menos conocidas, con la advertencia del autor que existen en algunos casos diferentes versiones entre los pueblos, e incluso entre las familias. El autor reproduce algunos romances que reflejan la historia de España, de Zamora y más específicamente de Sanabria «como si nos la estuvieran contando nuestros abuelos, juglares o ciegos de zanfona». Los romances eran una forma de transmitir noticias, pasajes históricos y como forma de entretenimiento en la época de los abuelos. Precisamente de la memoria de estas personas más mayores se ha rescatado ese legado cultural popular. Otero recalca que el folclore de Zamora es «de lo mejorcito que existe en España» y en del mundo. Un folclore recopilado en numerosas grabaciones sonoras y sobre el que hay diversos trabajos pero que es poco conocido por el gran público, incluso por los propios zamoranos. En este sentido el autor señala el trabajo de grupos y músicos como Habas Verdes, Jambrina y Madrid, Bajo Duero, Los Gaiteros de Pedrazales, Miguel Manzano y Manuel García Matos, entre otros, que llevan muchos años «reenseñándonos nuestras raíces». Para algunos lectores este nuevo libro será el descubrir un nuevo mundo de cultura sanabresa.