La comarca de Aliste en España y la región de Tras Os Montes en Portugal se vestían ayer de luto, tristeza y consternación para llolar la muerte de uno de los seis bomberos lusos heridos en la tarde del jueves mientras intentaban controlar el incendio, que originó una cosechadora mientras trabajaba cereal en la freguesía de Cicouro, para evitar su entrada en España por «La Canda». Antonio Nuno Ferreira, que tenía quemado más del 90% de su cuerpo, fallecía en la madrugada del domingo en la Unidad de Quemados del Hospital de «Prelada» en la ciudad de Oporto.

Antonio Nuno Ferreira, de 45 años, era natural de la aldea de Sao Martinho de Angueira, fronteriza con Alcañices, que fue su morada desde niño, siendo muy conocido y querido tanto en tierras trasmontanas como alistanas. Las lágrimas y el dolor inundaron el Parque de Bomberos Voluntarios del Concelho de Miranda do Douro (Distrito de Braganza) donde el fallecido era profesional, más concretamente operador de central en el cuartel de la histórica ciudad donde estaba casado y tenía un hijo menor.

Según las explicaciones del hospital luso de Prelada, «el bombero presentaba un cuadro clínico muy grave, con disfunción cardiopulmonar, no habiendo resistido la gravedad de las quemaduras». El siniestro se produjo el jueves cuando los bomberos lusos fueron sorprendidos en un cambio brusco del viento, quedando acorralados en medio del fuego. En el hospital de Prelada se encuentra así mismo el segundo bombero más grave Daniel Falcao Jorge Luiz, de 25 años, que sufrió quemaduras del 70 al 80% de su cuerpo. En cuanto al tercer herido de importancia, Víctor Ribeiro, de 32 años, está estable. Al entierro de Nuno Ferrirae, que se celebrará hoy a las 11 de la mañana, asistirán el vicepresidente de la Diputación, Aurelio Tomás, y los alcaldes de la comarca de Aliste.