La mayor parte de la inversión canalizada a través del Plan Municipal de Obras puesto en marcha este año por la Diputación Provincial ha servido para financiar actuaciones centradas en servicios básicos. El diputado de Obras, Manuel Vega, detalla que el 70% de las obras realizadas en los 220 municipios acogidos a estos fondos son de este tipo, que abarcan mejoras en saneamiento, abastecimiento, pavimentación y alumbrado. Esta clase de intervenciones no han requerido ninguna aportación económica por parte de los ayuntamientos, ya que han sido costeadas por la Diputación Provincial en su totalidad.

Otro 20% de las obras ejecutadas corresponden a instalaciones deportivas o de otro tipo que no son consideradas como servicios básicos. En este caso, los ayuntamientos solicitantes han tenido que aportar un 10% de la inversión requerida. El resto de las intervenciones realizadas con cargo al Plan Municipal de Obras de este año, otro 10%, han servido para realizar mejoras en casas consistoriales y edificios sociales. La inversión exigida a los ayuntamientos en esta ocasión ha sido de un 20%.

El límite establecido en las bases de la convocatoria de estas ayudas, dirigidas a municipios de la provincia con menos de 2.000 habitantes, deja fuera a los ayuntamientos de Morales del Vino, Toro y Benavente, que tienen un tratamiento específico con una subvención directa de la Diputación a una obra determinada.

En cuanto a la distribución de fondos del Plan Municipal de Obras, cada ayuntamiento solicitante ha recibido, en principio, 6.000 euros, a los que se suman 1.500 euros por cada una de las localidades anejas que tenga el municipio.

Una vez hecho este reparto, la cuantía restante hasta completar la inversión de los tres millones de euros ha sido distribuida conforme a los habitantes de cada ayuntamiento, resultando finalmente una ratio de 15,90 euros por habitante.