El grupo zamorano-madrileño «Urzes» presenta su primera obra recopilatoria del folklore zamorano, con un componente alistano sanabrés dominante en el repertorio. El músico de origen sanabrés Manuel Otero, directivo de La Casa de Zamora, promovió a lo largo de este año la grabación del primer CD del grupo «Urzes». La obra se presentará en Madrid el próximo 27 de octubre y la apertura de la obra no dejará indiferente a ningún oyente y amante de la música tradicional.

Hace tres años que el grupo de gaitas y percusión de La Casa de Zamora cuenta con el profesor José María Climent en sus filas, excomponente de los grupos La Musgaña y Clorofolk, y habitual colaborador de Javier Bergia y Marcus O´Murchu. «Partiendo de la gran base de contar con un músico de sus características, pensamos que todo el trabajo que llevábamos realizando desde hace más de diez años había que plasmarlo en unas grabaciones para que los futuros alumnos tengan una base fonográfica en la que fijarse», afirma Manuel Otero.

Así nació la idea de grabar por primera vez parte del repertorio que ensayan todos los miércoles, pero después de iniciado el trabajo y viendo los resultados se decidieron a dar el paso de mejorar sustancialmente, aprovechando la experiencia de José Climent, y poder hacer una grabación digna de ser comercializada.

El resultado no es que sea «digno», sino que es un disco que no solo será la referencia de los nuevos alumnos de las clases de gaita de fole y percusión, sino que ya es el disco de referencia del folklore de Zamora en Madrid y en todos los pueblos zamoranos de donde son o descienden los componentes de Urzes.

El disco lo componen 19 temas, algunos de ellos con la mezcla de varias canciones, todos populares, excepto el denominado Danzas de Antiguamente que es un ejercicio de interpretación polifónica de una Cantiga de Santa María de Alfonso X El Sabio. Algunas versiones están basadas en grabaciones cedidas por Alberto Jambrina y el Consorcio de Fomento Musical de Zamora como el «Agarrao Antiguo», «la Ronda de Segadores» o «el Tirioni».

Además es posible deleitar los oídos y los recuerdos con canciones como «El Mandil de Carolina», «Vengo de Moler Morena» o «el Romance de la Pastora».

Pero los miembros de «Urzes» han puesto todo el empeño posible no solo en que se pueda distribuir, sino en que la gente aprecie tener el disco original, buscando y realizando un diseño especial, con un libreto de 12 páginas con todas las explicaciones de cada canción y algunas letras. Y con ese aire «de documento antiguo» que porta todo el cd, incluyendo la imitación a un viejo disco de vinilo.

El título de la obra «De Urzes y Madroños» evoca su uso como proveedores de madera para la fabricación de las gaitas de fole en Zamora, y el madroño es un símbolo de Madrid que incluso aparece en su escudo. Además da la casualidad de que son dos especies vegetales de la misma familia, y «nos pareció divertido relacionar todo lo posible nuestro origen, Zamora y Madrid» explica Manuel Otero.

La recopilación musical está a la venta en Madrid, en las instalaciones de La Casa de Zamora, en la calle Tres Cruces 12, y está en marcha contactar con distribuidores por toda la provincia de Zamora, aunque desde principios del verano los componentes del grupo lo vienen dando a conocer en sus respectivos pueblos, sobre todo en Sanabria y Aliste.

La grabación recoge parte del repertorio musical del folklore zamorano, bebiendo de todas las fuentes posibles. Los componentes del grupo reconocen su agradecimiento «a todas las personas que nos hicieron llegar, con su voluntad y desinterés, la memoria y legado de sus ancestros, y por transmitirnos las músicas que algún día les fueron confiadas y que más atrás en el tiempo les confiaron a ellos». Esas fuentes han sido lo más diversas posible, «hemos aprendido de nuestros mayores en primer término, que siguen todavía siendo fuente inagotable del conocimiento musical de nuestra tierra; de los temas que han quedado registrados en trabajos de gente como los maestros Jambrina, Climent, y los diferentes grupos etnográficos de la provincia; y del propio conocimiento musical tradicional de los componentes del grupo, que bien nacidos en Zamora o fuera de ella, todos estamos totalmente identificados con las señas de identidad de esta preciosa tierra».

Con este proyecto musical se consigue que «cierres los ojos y te transportes a los pueblos de Zamora. Sentirte lejos de tu casa y de tus raíces hace que valores enormemente todo lo que te recuerda a tu pueblo», subraya Manuel Otero.