Dos de los 24 mayores incendios forestales producidos en España desde el comienzo del presente año se han localizado en Sanabria, según se recoge en un estudio elaborado por el grupo ecologista WWF. Se trata del incendio surgido en Pías el 8 de enero y el producido en Hermisende el 28 de febrero. En los dos siniestros, ambos intencionados, se quemaron 3.500 hectáreas (en el primero, 1.115 y en el segundo 2.329). Se da la circunstancia de que en ambos se destruyó una gran masa forestal, muy variada y de un gran valor ecológico.

En el fuego de Pías se quemaron bosques de tres especies diferentes de árboles: rebollos, robles y abedules). Las llamas afectaron también a una zona de especial protección para las aves.

El siniestro de Hermisende calcinó, sobre todo, bosques de melojos. Los forestales tardaron varios días hasta extinguirlo por completo.

Los 24 incendios recogidos en el informe de WWF son aquellos considerados «grandes incendios forestales», es decir, los que superan las 500 hectáreas.

Cabe destacar que en el 65% de los casos el fuego ha afectado a enclaves naturales protegidos. Destaca la quema del 9% del Parque Nacional de Garajonay, en la isla de La Gomera así como los incendios en el Parque Natural del Alto Tajo o el de las Fragas de Eume, en las provincias de Guadalajara y La Coruña, respectivamente.

En total, el fuego ha arrasado en España más de 135.000 hectáreas durante 2012, una superficie superior a la de la isla de Gran Canaria, y causado seis víctimas mortales. WWF calcula que España pierde de media 20.000 hectáreas de gran riqueza natural cada año por incendios.