Tardobispo ha vivido unos intensos días de fiestas para honrar a su patrono, San Salvador. Entre las muchas atracciones de las que han podido disfrutar los vecinos se encuentra la fiesta de la espuma, especialmente pensada para los más pequeños, aunque en esta ocasión las temperaturas no acompañaron demasiado y solo se metieron los más valientes. Era el caso del pequeño Jorge quien celebraba su cumpleaños y se vio acompañado por muchos amigos. Las mujeres de El Perdigón aprovecharon también las fiestas para realizar una exposición con la manualidades que realizan a lo largo del año en distintos talleres. Así, por el edificio de las escuelas pasaron muchas personas a conocer de cerca los trabajos de las señoras, muy elogiados por el público, como son bordados, espejos, cuadro o muebles antiguos restaurados.