La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) exige al Ayuntamiento de la localidad de Villamayor de Campos el pago de 5.421 euros por la música interpretada en las verbenas de la s fiestas patronales de los años 2007, 2008, 2009 y 2010.

La Corporación Municipal desestimó la posibilidad de iniciar un proceso judicial contra la SGAE y ha llegado a un acuerdo por el que se comprometen a pagar la suma de 903 euros al mes durante seis meses para vencer la deuda. Según explicó el alcalde de Villamayor, Antonio Sanz, «ya hemos hecho efectivo un pago y así hasta el final, ya que según ellos el Consistorio, en las fiestas, es una empresa y tenemos que pagar».

El regidor asegura que para exigir el pago por la música «se agarran a las bases de la Sociedad General de Autores y Editores y para demostrárnoslo aportan carteles e incluso los recortes de prensa donde se anuncian las fiestas».

El enfado del alcalde más allá cuando asegura que «gracias a este grupo de amigos de buen vivir de Teddy Bautista y compañía, con la cantidad que nos demandan se han cargado el presupuesto de lo que cuesta el mantenimiento del colegio», a la vez que añade que «a partir de ahora no va a haber problema ya que tenemos contratada a la mujer del Rastro de Madrid para las próximas fiestas patronales».

Sanz continua y explica que «si Mariano Rajoy no cambia esto seguiremos viviendo la misma tiranía y después hablan del desarrollo rural que es la gran mentira de los políticos. Hasta que no acaben con sus pueblos y sus gentes no quedarán a gusto». A pesar del coraje que le produce la situación confirma con resignación que «a partir de ahora a los pueblos no nos queda más remedio que pagar si no queremos ver como nos reclaman grandes cantidades todos los años».

En la situación de Villamayor de Campos se encuentran la inmensa mayoría de los pueblos de la comarca de Tierra de Campos, pero en algunos casos como Prado o Villar de Fallaves las cantidades son pequeñas y en otros casos se ha pagado lo exigido y a partir de entonces se comunicará cada espectáculo musical que se realice en las localidades.

Antonio Sanz confirmó que en estos días «emitiré un bando para informar de la situación a todos los vecinos para que sean conscientes de los que hay» y asegura que «todo esto nos lleva a secundar la idea del alcalde Monfarracinos y poner en las fiestas música de hace cincuenta años con el fin de no darles un duro a esta gente».

Y es que «cobran por todo hasta por las charangas y los pasacalles con tarifas estipuladas según el número de habitantes que tenga el pueblo y luego, si vas a juicio pierdes y la suma a pagar es mucho mayor».

Las corporaciones de varios pueblos de la provincia vienen denunciando los abusivos cobros a los que están sometidos por parte de la entidad.

Así, el alcalde de Monfarracinos, Manuel Martín hizo, hace dos meses un llamamiento a todos los ayuntamientos de la provincia para que «se declaren en rebeldía y no paguen las cantidades exigidas por la SGAE». La postura de Monfarracinos viene a refrendar la decisión adoptada a principios del pasado año por los pueblos de Mancomunidad Tierra del Vino al rebelarse contra el canon , que califican como un auténtico «impuesto revolucionario» que obliga a abonar el ocho por ciento de todo tipo de actuación o espectáculo, incluyendo no sólo el caché de los artistas, sino también aspectos de intendencia, como «el alquiler del generador, las luces o el medio de transporte que utilice la figura o el grupo contratado».