Un camino que une la carretera de Gijón-Sevilla (N-630) con la carretera de La Hiniesta será convertido en carretera para dar salida a la Ronda Norte a los municipios de las comarcas del Pan y Alba.

El trazado que fue cañada real se convertirá en camino y después en calzada. La versión preliminar del Plan de Zona que especifica las acciones a realizar en el Programa de Desarrollo Rural Sostenible , redactado por la Junta de Castilla y León, recoge en su eje 2 (infraestructuras y equipamientos básicos) entre otras actuaciones, las «obras de acondicionamiento de la carretera de enlace entre la N-630 y la ZA-900», que será ejecutado por la Consejería de Fomento.

El alcalde en funciones de Roales del Pan, Miguel Ángel San Martín, mostró su satisfacción por el proyecto y explicó que «hay dinero ya adjudicado por parte de la Junta y del Gobierno central, por lo que esperamos que lo estén planificando y se pueda comenzar a lo largo de este año».

Los pasos preliminares para llegar a convertir en carretera el camino consisten en cambiar el trazado de la cañada y declararlo camino, que según San Martín esta fase ya está «en informe» y después convertir el camino en carretera cuyo coste «debería asumirlo la Diputación Provincial».

Aunque toda la vía transcurre por el término municipal de Roales, la infraestructura ha sido demandada por los regidores de Roales, La Hiniesta, Andavías, Palacios del Pan, Manzanal del barco y Carbajales de Alba, con el fin ahorrarse varios kilómetros para acceder a las grandes vías de comunicación como son la Ronda Norte y la Ronda Este. En opinión de los regidores la nueva conexión «será un paso más para favorecer el desarrollo rural de la zona».