El Scriptorium tabarense fue, sin lugar a dudas, el más importante del mundo en la Edad Media. Así se deduce de las afirmaciones, auténticas sentencias, de John Williams a su paso por Tábara y León, donde ha dejado claro que al menos cinco de los códices más importantes de la historia tienen relación directa con el escritorio del monasterio de San Salvador.

Williams es catedrático emérito de la Universidad de Pittsburg en Estados Unidos y asesor especialista del Museo de Arte Metropolitano de Nueva York, además de miembro del Instituto de Estudios Avanzados de Princetón, profesor de la Academia Medieval de América, un erudito en códices medievales y el mayor y mejor experto y estudioso del mundo en Beatos.

En el monasterio de San Salvador fueron realizados los de Tábara, Gerona y Escalada. El experto americano defiende ahora con pruebas y argumentos fiables que el Beato de Manchester y el Beato de Las Huelgas fueron copiados en Burgos del propio Beato de Tábara, que fue utilizado como modelo.

Sobre el Beato de Tábara, afirma que «se desconoce como llegó hasta Burgos, pero en mi opinión, el Beato conservado en la Biblioteca John Rylands, datado alrededor de 1175, fue copiado, una vez en Burgos, del Beato de Tábara».

Según el Catedrático de Pittsburg, «los servicios a la tradición prestados por el Beato de Tábara no para allí: en 1220 el Beato de Tábara fue copiado otra vez en un manuscrito, producto creo yo de Toledo, que acabó en el monasterio cisterciense de Las Huelgas, también Burgos» y sentencia que «el manuscrito de Tábara sirviera de modelo no puede dudarse, ya que termina con una replica del retrato del tan extraordinariamente creativo scriptorium de Tábara».

El Beato de Manchester, conservado en la Biblioteca John Rylands de Inglaterra (desde 1901), esta formado por 240 folios, de 455 por 325 milímetros, contando con un total de 120 miniaturas, muchas de ellas a página entera.

Su redescrubrimiento oficial 695 años después de ser iluminado, en 1870, tuvo lugar en París a raíz de la venta de los libros del Conde de Altamira y Marqués de Astorga, donde fue adquirido por Bernard Quariich.

Por su parte el Beato de Las Huelgas, terminado en 1220, se encuentra actualmente en la Biblioteca Pierpont Morgan de Nueva York, donde también está el de Escalada (este hecho en Tábara por Magius). Inicialmente habría estado formado por 187 folios, de los que se conservan 184, habiéndose perdido tres. En este caso su escritura es ya gótica. Su nombre le viene por haber estado en «Las Huelgas Reales» de Burgos hasta el siglo XIX.