El inicio de la vendimia se retrasa en la Denominación de Origen «Tierra del Vino» hasta finales de este mes o principios de octubre ante la falta de maduración suficiente de las uvas. «Volvemos a vendimiar como se hacía antaño, en octubre, pues de un tiempo para acá lo estábamos haciendo siempre desde mediados de septiembre» explica el presidente de la Denominación de Origen «Tierra del Vino», Juan Miguel Fuentes Sardón. Las perspectivas de recolectar el fruto en óptimas condiciones parece que están aseguradas, porque sanitariamente la uva está perfecta y no ha sufrido ninguna enfermedad.

Otra cosa es la cantidad. Si en un principio se barajó una producción de un 40% menos que en la anterior campaña, cuando se recogieron cerca de un millón doscientos mil kilos ahora viticultores y bodegueros consideran que la merma puede ser aún mayor y lo sitúan en el 50%, debido principalmente a las heladas que sufrieron los cultivos durante la pasada primavera, en el mes de mayo. En algunos pagos se volvió a producir la floración, pero el fruto no es el mismo que daría una viña sin haber sufrido las inoportunas heladas.

A partir de ahora cuando se empiezan a hacer los análisis de maduración y estado de la viña como paso previo a la recolección, la uva tinta presenta una graduación entre 11,5 y 12 grados. Así las cosas, se esperará a que la materia prima madure un poco más para empezar su recogida antes de transformarla en vino. En la Denominación de Origen «Tierra del Vino» existen en estos momentos adscritas nueve bodegas con etiquetas diferentes para comercializar los tintos, rosados, blancos y moscateles, que son las variedades principales de la mención de calidad.