Gallegos del Campo.- El grupo de baile, teatro y actividades culturales de la asociación cultural "Campo de Aliste" de Gallegos del Campo va a escenificar durante los carnavales, coincidiendo con el sábado día 2 de febrero una especie de antruejo carnavalesco, tratando de recuperar la celebración de la Obisparra de cara al próximo año en su fecha original aprovechando el proyecto Máscara Ibérica para tratar que entre dentro del mismo.

Es uno de los propósitos de la asociación la recuperación de la misma ya que supone una de las principales señas de identidad y de mayor valor etnográfico dentro de la cultura popular del pueblo, no catalogada, que «junto a otras celebraciones genuinas hoy perdidas en el olvido estamos tratando de recuperar progresivamente hasta establecer todo un calendario lúdico festivo anual que dinamice mínimamente la vida rural, tales como las comedias (en preparación), los ramos y corderas, los reyes, semana santa, corpus, magostos y demás».

Sirviendo los carnavales como referente de revitalización de una celebración que en su tercera edición este año desde que se inició el proceso de recuperación, se ha tratado de innovar con el máximo apego a la tradición y al rigor contextual de la cultura popular.

Se han venido celebrando en ediciones pasadas adaptaciones cómicas y carnavalescas de celebraciones y ritos tradicionales de la cultura tradicional para su documentación, inventario, estudio y conservación exhibición junto con otros bienes materiales e inmateriales de la cultura para que sirvan de motor de desarrollo endógeno: así en anteriores ediciones afirman los promotores «realizamos una versión carnavalesca de las antiguas rondas de mozos con tonadas y pasacalles chirigoteros; el año pasado en la segunda edición adaptamos el ritual de una boda tradicional ya perdido en el olvido (también trataremos de recuperar) con tintes pícaros y carnavalescos escenificando con sarcasmo toda una boda a la antigua usanza utilizando los versos y coplas del ritual con puntillas cómicas y provocadoras dando rienda suelta a la originalidad y a la comicidad».

Así este año, se pretende continuar con la idea de adaptar al carnaval los ritos y motivos de otras celebraciones tradicionales para desarrollar una de las actividades más variopintas y divertidas donde se puede desarrollar de mejor forma la imaginación, aprovechando precisamente «la escasez de referencias antiguas que nuestro carnaval poseía, lo cual nos permite innovar y jugar con la tradición.

Aparte de la ligazón que en nuestra tierra siempre han tenido las obisparras y mascaradas varias con el carnaval y aprovechando también que los personajes principales de la boda tradicional del año anterior (los novios) simbolizaban la unión de estas dos celebraciones encarnados en don carnal y doña filandorra».